Autos inteligentes, con tecnología hecha en México

Por Deyanira Vázquez | Reportera

Las eventualidades y distracciones durante la conducción son un factor que se asocia con más de 1 millón de accidentes fatales a nivel mundial, de acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud. En México, solo en 2022, se reportaron 377,231 accidentes de diversa índole, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Ante esta realidad, los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS) cobran cada vez más importancia en la decisión de compra de un automóvil nuevo. Estos sistemas, que podrían considerarse como «tecnologías que salvan vidas», utilizan datos de sensores, como radares y cámaras, para brindar asistencia en la conducción. Esto incluye la detección de objetos, obstáculos, personas; asistencia en el frenado y prevención de colisiones.

Entre estos ADAS destaca, por ejemplo, el Control Electrónico de Estabilidad (ESP, por sus siglas en inglés), producido en la planta de Aguascalientes de Bosch México.

Eduardo Watty, vicepresidente de Ventas de Soluciones de Movilidad en Bosch México, apunta que la importancia del ESP es tal que ahora la regulación mexicana en la industria automotriz ya lo considera como un dispositivo de seguridad obligatorio en los autos. Este sistema ha demostrado prevenir hasta el 80% de los accidentes por derrape.

Alexander Firsching, presidente de Bosch México, destaca que ‘‘un gran avance hacia la visión de cero accidentes de la compañía es que, quedara establecida la obligatoriedad de todos los sistemas de Control Electrónico de Estabilidad (ESP), parte del sistema ADAS (Advanced Driver Assistance Systems), en las normas mexicanas a partir de este año’’.

Watty, también señala que Bosch desempeña un papel fundamental en la producción de diversos componentes clave para la seguridad automotriz. Esto incluye la fabricación de radares de mediano y largo alcance, sensores ultrasónicos, cámaras de reversa y una variedad de componentes electrónicos en sus plantas en Juárez y Celaya. En la planta de San Luis Potosí, se producen los sensores de velocidad, mientras que en Aguascalientes se enfocan en sistemas de frenado de última tecnología.

Además, Bosch continúa liderando el camino hacia una conducción más segura con su más reciente innovación en IA generativa, brindando acceso a datos precisos de los sensores del vehículo. Esto, potencialmente, previene accidentes al dotar a los sistemas de conducción automatizada de una comprensión más avanzada del entorno, identificando objetos específicos para tomar medidas preventivas más precisas, como advertencias al conductor o frenado de emergencia. –sn–