La UNAM y la Academia Nacional de Arquitectura: una alianza de honor
Por Martín García | Reportero
El rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, y el poeta y miembro de la Junta de Gobierno de esta casa de estudios, Vicente Quirarte Castañeda, fueron nombrados académicos honorarios de la Academia Nacional de Arquitectura (ANA).
La ceremonia se llevó a cabo en la Sala Mexicana de la Biblioteca Nacional, donde el presidente de la ANA, José Francisco Reygadas Valdéz, entregó la venera y diploma a ambos distinguidos universitarios.
Enrique Graue Wiechers expresó su admiración por la capacidad que tienen los arquitectos para vislumbrar y plasmar en tercera dimensión lo que otros solo pueden conceptualizar en un solo plano.
Arquitectura humana
La arquitectura es esencialmente humana, como lo son también la literatura, la poesía y la medicina. Es probablemente esa la razón por la que el doctor Vicente Quirate y el rector Graue fueron honrados en este magnífico momento.
Vicente Quirarte agradeció la distinción y señaló que entrar a la Academia implica no solo obtener un laurel, sino también el compromiso de trabajar con el arma de su quehacer para construir el mapa concreto y espiritual de la ciudad.
El arquitecto es un poeta y sus sueños se ven reflejados en el patrimonio que nos deja cada día. Su necesidad y obligación es crear para los otros y hacer de su existencia un oficio más pleno.
Querencia y trabajo
El tiempo le ha concedido a Vicente Quirarte la amistad de diversos arquitectos que forman parte de su querencia y trabajo, a quienes recordó en su mensaje de ingreso a la Academia.
La Academia Nacional de Arquitectura otorga el título de académico honorario a aquellos que comparten sus principios de libertad, pensamiento independiente, investigación emancipada del conocimiento y rebeldía en la creación.
El presidente de la ANA, José Francisco Reygadas Valdéz, afirmó que la alianza con la UNAM es fundamental para llevar a cabo proyectos que dignifiquen los espacios humanos. –sn–

