Expertos de la ONU hacen un llamado para poner fin a la “guerra contra las drogas” global

Expertos de la ONU hacen un llamado para poner fin a la “guerra contra las drogas” global


Andrés de Compostela | Corresponsal

Washington, EU.- Expertos de Naciones Unidas* dijeron que la comunidad internacional debe reemplazar el castigo con el apoyo y promover políticas que respeten, protejan y garanticen los derechos de todos.

Con motivo del Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas 2023, las personas expertas llamaron a un cambio transformativo en el abordaje internacional sobre el tema de drogas, para enfocarse en la salud y otros derechos humanos.

“La ‘guerra contra las drogas’ puede entenderse en gran medida como una guerra contra las personas. Su impacto ha sido mayor en aquellas personas que viven en la pobreza, y frecuentemente se superpone con la discriminación dirigida a grupos marginados, minorías y pueblos indígenas.

Impacto discriminatorio

«En nuestra investigación y experiencia, hemos encontrado que dicho impacto discriminatorio es un elemento común en las políticas de drogas con respecto a la más amplia gama de derechos humanos, incluyendo el derecho a la libertad personal.

«El derecho a no ser objeto de tortura y otros malos tratos, así como a trabajos forzados; el derecho a un juicio justo; el derecho a la salud, incluyendo el acceso a medicamentos esenciales, cuidados paliativos, prevención y educación integral sobre drogas, tratamiento de drogas y reducción de daños; el derecho a una vivienda adecuada.

La libertad de discriminación y el derecho a un trato igualitario ante la ley; el derecho a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible; los derechos culturales y las libertades de expresión, religión, reunión y asociación.

Costos masivos para la dignidad

A nivel mundial, el control de drogas ha tenido costos masivos para la dignidad, humanidad y libertad de las personas de ascendencia africana, con informes que muestran que las personas afrodescendientes enfrentan intervenciones desproporcionadas e injustas de las fuerzas del orden, detenciones y encarcelamientos por delitos relacionados con las drogas.

En varios países, la ‘guerra contra las drogas’ ha sido más efectiva como un sistema de control racial que como una herramienta para reducir los mercados de drogas. Las intervenciones policiales basadas en el perfilamiento racial siguen siendo generalizadas, mientras que el acceso a tratamientos basados en evidencia y reducción de daños para las personas de ascendencia africana sigue siendo críticamente bajo. –sn–