Suspenden maestros en Chiapas labores por enfrentamientos del crimen organizado

Maestros en Chiapas suspenden labores por enfrentamientos del crimen organizado

Mauro López | Corresponsal

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Cerca de 5,000 maestros que prestan sus servicios educativos en los municipios de las zonas sierra y fronteriza de Chiapas han tomado la decisión de suspender sus labores debido a los crecientes enfrentamientos entre grupos del crimen organizado y bloqueos en las entradas a las cabeceras municipales.

Los disturbios en esta región, ubicada en la frontera con Guatemala, han escalado desde el 7 de septiembre, cuando los dos principales cárteles de la droga en México intensificaron sus enfrentamientos en su lucha por el control de las rutas de tráfico.

Los pobladores, influenciados por estos grupos criminales, han bloqueado las entradas a los municipios y establecido retenes en las rutas de acceso a la región. Estos bloqueos tienen como objetivo obstaculizar mutuamente el acceso, lo que ha llevado a enfrentamientos directos entre los grupos.

Todas las escuelas

En este contexto, Celerino Nolasco Alvarado, supervisor escolar de la Zona 025, que abarca varios municipios de la zona sierra, ha enviado un comunicado a la Secretaría de Educación federalizada informando la suspensión temporal de las actividades docentes en todas las escuelas de la zona.

En el comunicado, menciona que la decisión se debe a la «negligencia y ausentismo de las autoridades competentes para hacer frente a los actos delictivos cometidos por grupos criminales». Además, destaca que la región está sumida en el «pánico e incertidumbre» y que la suspensión se mantendrá hasta que la seguridad regrese.

Honduras de la Sierra

Por su parte, los maestros de la zona Honduras de la Sierra, en otro comunicado dirigido al gobernador Rutilio Escandón y las autoridades educativas, también han anunciado la suspensión de sus labores educativas. En la carta pública, argumentan que no pueden poner en riesgo la integridad física y psicológica de alumnos, padres de familia y docentes debido a la violencia en la región.

Estos maestros hacen un llamado a las autoridades para garantizar las condiciones necesarias de seguridad antes de regresar a sus actividades diarias y advierten que responsabilizarán a los tres niveles de gobierno y educativos por cualquier eventualidad.

Se estima que alrededor de 5,000 docentes trabajan en esta zona, atendiendo a más de 150,000 niños y adolescentes que se ven afectados por la violencia en la región. Algunos maestros han quedado atrapados en las comunidades donde laboran debido a los bloqueos y retenes establecidos por grupos del crimen. –sn–