López Obrador aseguró que México no aceptará deportaciones masivas y pidió esperar a las resoluciones que emitan los jueces en Estados Unidos.
Por Carlos Lara Moreno | Reportero
Ante la incertidumbre que ha generado la Ley SB4 en Texas, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que su gobierno se mantendrá a la espera de lo que emitan las autoridades judiciales en Estados Unidos para emitir alguna postura.
En conferencia de prensa, López Obrador dijo que está Ley SB4 es “draconiana,deshumanizada y anticristiana”, ya que criminaliza a los migrantes en Texas.
“Nada más decir que desde luego estamos en contra de esta ley draconiana, completamente opuesta, contraria a los derechos humanos.
Convivencia humana
“Una ley deshumanizada por completo, anticristiana, injusta, violatoria de preceptos, de normas, de la convivencia humana, no solo del derecho internacional sino hasta violatoria de la Biblia, y esto lo digo porque quienes aplican estas medidas injustas, inhumanas van a los templos”, expresó en el Palacio Nacional.
El Jefe del Ejecutivo también refirió que “se les olvida que en la Biblia se habla de tratar bien al forastero, y desde luego del amor al prójimo, son algunas autoridades muy hipócritas, toman protesta con la Biblia”.
Acotó que está Ley es violatoria al derecho internacional ya que “no puede un estado tener una legislación que corresponde al fuero federal, es como si el gobernador de Tamaulipas aplicara una ley en contra de los texanos que visitaran México o transitaran por Tamaulipas, no les corresponde a los Gobiernos estatales”.
En contra de la decisión
El mandatario recordó que el gobierno de Estados Unidos está en contra de esta decisión, “no queremos adelantar lo que podríamos hacer en caso de que quieran en Texas, el gobernador y todos estos antiinmigrantes, antimexicanos, hacer si pretendieran deportar por ejemplo, que no les corresponde·.
Por último, dejó claro que su Administración no aceptará deportaciones de migrantes que provengan del Gobierno de Texas, encabezado por Gregg Abbott.
“Nosotros no aceptaríamos deportaciones, de una vez adelanto, del Gobierno de Texas, y no nos vamos a quedar con los brazos cruzados, esa es la respuesta. Pero con más conocimiento del derecho internacional con más diplomacia, va a haber una respuesta de SRE, porque también todavía no está definido”, sentenció. –sn–

