Cambio climático impacta crecimiento económico en México:

Por Paola Ramírez | Reportera

El calentamiento global, con sus efectos en la temperatura y las precipitaciones, está generando consecuencias adversas para la economía mexicana, según afirmó Armando Sánchez Vargas, director del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM.

Durante el Seminario de los Avances de Investigación (SAVI) 2024, organizado por el IIEc en conmemoración del Día de la Tierra, Sánchez Vargas presentó resultados alarmantes sobre las proyecciones económicas del país hasta el año 2100.

Sánchez Vargas explicó que su investigación, plasmada en el libro «Efectos del cambio climático en el crecimiento económico en México», resalta que el impacto negativo del deterioro ambiental se sentirá de manera más intensa en ciertas regiones del país, debido a diferencias en la vulnerabilidad de la población, los niveles de inversión y empleo, y la heterogeneidad entre las zonas.

El experto subrayó que existe una correlación histórica entre la temperatura, el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita y la tasa de crecimiento económico, donde eventos meteorológicos extremos afectan negativamente la actividad económica. Esto significa que a medida que las temperaturas aumentan, el ingreso per cápita tiende a disminuir.

Cambio climático

Sánchez Vargas destacó que los impactos del cambio climático varían entre las regiones, y que las comunidades menos desarrolladas suelen ser las más vulnerables a los eventos climáticos extremos. Además, señaló que el sector primario, como la agricultura, ganadería y pesca, se ve negativamente afectado por el cambio climático debido a su alta dependencia de las condiciones climáticas.

En cuanto a los sectores industrial, comercial y de servicios, Sánchez Vargas explicó que también sufren impactos negativos, aunque de manera diferente, con las principales repercusiones relacionadas con la productividad laboral.

El director del IIEc destacó que su investigación reveló que un aumento del 1 por ciento en la temperatura puede reducir el crecimiento económico nacional entre un 0.77 y un 1.76 por ciento. Estas cifras implican que para el año 2100, la variación de la temperatura podría llevar a una reducción del PIB per cápita de entre un 1.96 y un 2.03 por ciento. Además, el cambio en las precipitaciones podría frenar el crecimiento entre un 1.03 y un 1.66 por ciento para ese mismo período.

Reducir las emisiones

Ante estos desafíos climáticos, Sánchez Vargas enfatizó la importancia de implementar políticas para reducir las emisiones de CO2 a nivel global, con el objetivo de proteger el crecimiento económico y a las poblaciones más vulnerables. Propuso medidas de mitigación como un programa de reordenamiento ecológico territorial, mejor manejo de residuos sólidos, un plan forestal sostenible, sistemas agroforestales y silvopastoriles, y rotación de cultivos.

Durante el seminario, también se presentaron estudios sobre los impactos del cambio climático en el sector agropecuario en México, coincidiendo en que las proyecciones económicas y sociales para los próximos años son desfavorables. Saúl Basurto Hernández, investigador de la UNAM, señaló que se espera un aumento significativo de la población para finales del siglo, lo que implicará una alta demanda de alimentos. Asimismo, Jorge Zaragoza Badillo, del IIEc, destacó la intensa actividad económica y el crecimiento urbano desordenado como principales causas de las islas de calor en la Zona Metropolitana del Valle de México.

El seminario reunió diversas investigaciones y reflexiones académicas sobre el cambio climático y su impacto en la sociedad y la economía, en el marco del Día de la Tierra que se conmemora el 22 de abril desde 1970. –sn–