«El PRD ha desaparecido», ya no existe: Jesús Zambrano

Por Gabriela Díaz | Reportera

El que será el último presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, reconoció la desaparición del partido en un emotivo discurso ante la corriente de Los Chuchos. Con nostalgia, admitió que el PRD ya no existe, un partido que se construyó con el registro original del PCM, PSUM y PMS.

Zambrano recordó las «gloriosas batallas» y múltiples sacrificios que marcaron los inicios del PRD hace 35 años. Habló sobre la ilusión óptica que vivieron en las plazas públicas, las calles repletas y la conversación pública. La “marea rosa” y algunas encuestas los llenaron de esperanza.

“El golpe de realidad fue brutal”, admitió Zambrano. Nunca imaginaron que enfrentarían esos resultados tan adversos. En varias de las grandes urbes, solo el 60% de la gente votó, y sectores importantes de clases media y alta optaron por Claudia Sheinbaum.

Errores de la coalición

Zambrano también aceptó que la coalición opositora cometió múltiples errores. No hubo una estrategia de campaña discutida y acordada por todos. La falta de coordinación entre el “cuarto de guerra” y las dirigencias partidistas fue un obstáculo significativo.

La falta de coordinaciones estatales que dieran seguimiento a las campañas locales impidió una campaña única con el paraguas nacional de Xóchitl Gálvez a la cabeza. Los importantes recursos financieros aportados a la campaña presidencial no se reflejaron en la propaganda.

La propaganda de las y los candidatos, salvo excepciones, no incorporó la imagen de Xóchitl Gálvez. Esto contrastó con la candidata oficialista, cuya imagen sí fue consistentemente promovida.

Decisiones erróneas

“El diseño de las giras de nuestra candidata presidencial no se decidió con las direcciones nacionales”, señaló Zambrano. Esta falta de claridad y estrategia contribuyó a los pobres resultados electorales.

Zambrano también mencionó la falta de un perfil claro de Xóchitl Gálvez. No quedó claro qué representaba y qué ofrecía, lo que afectó la percepción pública, a pesar de sus esfuerzos extraordinarios como candidata mujer.

En su conclusión, Jesús Zambrano lamentó profundamente la pérdida del registro del PRD. Su discurso fue una reflexión sobre los errores cometidos y un llamado a la autocrítica dentro de la coalición opositora.

Futuro incierto

El futuro del PRD ahora es incierto. Con la pérdida del registro, queda en el aire cuál será el destino de los militantes y las alianzas formadas en torno al partido. Zambrano no ofreció una solución clara, pero enfatizó la necesidad de aprender de los errores. –sn–