Acudir a alguna de las fiestas populares de los barrios madrileños es una forma distinta de empaparse de la cultura más tradicional
Por Deyanira Vázquez | Reportera
Cultura, tradición, historia, arte, ocio, gastronomía, etc. Madrid, aunque no es un destino de referencia en verano, también es un lugar donde poder entretenerse y disfrutar durante esta época del año.
Viena Capellanes, la cadena de restauración que lleva presente en la ciudad desde hace 150 años, ha elaborado una lista que recoge distintos planes para que madrileños y turistas puedan sacarle el máximo partido al verano de la capital.
Disfrutar de la cultura gastronómica madrileña. La gastronomía de Madrid es muy rica y variada. En sus bares y tascas se puede disfrutar de tapas de callos a la madrileña, bocadillos de calamares y, por supuesto, aunque en verano quizás no apetezca demasiado, el plato estrella es el cocido madrileño.
Tejas de almendras
Pero, además, la capital tiene muchos dulces típicos: bartolillos, rosquillas de Alcalá, barquillos, tejas de almendras o los deliciosos caramelos de violetas. Todos estos dulces son imprescindibles en cualquier visita a Madrid y en cualquier pastelería castiza.
Además, recientemente, el distrito de Hortaleza ha elegido un postre representativo de este barrio. Viena Capellanes ha sido la encargada de diseñar la receta y la estética de este dulce: una tarta de queso con base de galleta de mantequilla, barquillo de chulapo y chocolate blanco, mousse de queso de cabra de la Sierra de Guadarrama, interior gelificado de fresa y tomate de la Vega de Aranjuez y glaseado de fresa.
Tour de Misterios y Leyendas. Madrid es una gran ciudad y, como tal, cuenta con muchos lugares donde sucedieron cosas inexplicables. ¿Qué mejor momento para conocerlas que una noche de verano?
Verano madrileño
Madrid desde las alturas. El buen tiempo y los cielos despejados son un habitual durante el verano madrileño. Un plan para poder aprovecharlo es ir de tardeo en alguno de los muchos rooftops de la capital y disfrutar de las vistas y el contraste entre los altos edificios y el centro histórico.
Un pícnic durante el atardecer. Madrid cuenta con grandes zonas verdes donde disfrutar de un agradable pícnic y aprovechar para fotografiar el atardecer: el parque de las Siete Tetas, Madrid Río, el jardín de las Vistillas, el Retiro o el Templo de Debod suelen ser los más habituales para ello. –sn–

