Efectivos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana dialogaron con el hombre y evitaron una tragedia
Por Paola Ramírez | Reportera
En un acto rápido y coordinado, policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México evitaron que un hombre de 25 años atentara contra su vida en la Terminal de Autobuses de Pasajeros de Oriente (TAPO), ubicada en la alcaldía Venustiano Carranza.
Los hechos ocurrieron cuando los uniformados realizaban labores de vigilancia en la Calzada Ignacio Zaragoza, en la colonia 7 de Julio. Al percatarse de que un hombre se encontraba en lo alto de un muro del segundo nivel, los agentes activaron los protocolos de emergencia.
Los efectivos de la Policía Auxiliar iniciaron un diálogo con el joven, quien había manifestado su intención de arrojarse desde una altura de seis metros. Con una estrategia de confianza, lograron convencerlo de desistir de su intento.
Diálogo de confianza
Mientras continuaba el diálogo, otros policías colocaron una escalera en el lugar. Finalmente, pudieron bajar al hombre de manera segura, sin que sufriera lesiones aparentes. La rápida intervención de los elementos evitó lo que pudo haber sido una tragedia en la terminal.
Una vez que el hombre fue puesto en un lugar seguro, los policías solicitaron la asistencia de los servicios médicos. Al revisarlo, los paramédicos confirmaron que el joven se encontraba estable y sin signos de lesiones físicas que requirieran atención urgente.
A pesar de la situación, el hombre fue trasladado ante el Juez Cívico para determinar su situación jurídica. Este procedimiento forma parte del protocolo para deslindar responsabilidades y evaluar las condiciones en que ocurrió el incidente.
Crisis emocionales
Los efectivos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana están capacitados para intervenir en situaciones de riesgo, especialmente cuando se trata de proteger la integridad física de las personas. Este caso evidenció la preparación de los policías para actuar en momentos de crisis emocionales.
La SSC hace un llamado a la ciudadanía para que, en caso de sentirse en peligro o en crisis, busquen la ayuda de los policías que se encuentran en las calles y puntos estratégicos de la ciudad. La atención inmediata puede hacer la diferencia en situaciones de riesgo.
Este tipo de acciones refuerza el compromiso de las autoridades capitalinas con los sectores más vulnerables de la población. El rescate del joven en la TAPO es un ejemplo del trabajo que realizan diariamente los cuerpos de seguridad para salvaguardar la vida de los ciudadanos. –sn–

