En México, sacude los DH la violencia desbordada de los últimos días: GIDH

Sacude los DH la violencia desbordada de este fin de semana: GIDH

Por Martín García | Reportero

Ante diversos hechos registrados en los últimos días de violencia contra defensores de derechos humanos, activistas, académicos y ciudadanos en general, el Grupo Integral de Derechos Humanos (GIDH) «Lex-magister» reclamó a las autoridades de los tres órdenes de gobierno asumir su responsabilidad para garantizar la vida de las personas.

En las últimas horas se dio a conocer que Marcelo Pérez Pérez, sacerdote y defensor indígena de los derechos humanos, fue asesinado en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, tras ser atacado por sujetos en motocicleta que dispararon repetidamente contra su vehículo, recordó el presidente del GIDH, Jesús Rey Fierro Hernández.

El doctor en derecho relató que, “el ataque ocurrió poco después de que el sacerdote oficiara una misa en el Barrio de Cuxtilali este mismo domingo, dejando consternada a la comunidad local y de defensa de las garantías individuales”.

Jesús Rey, reconocido con el Premio Nacional de Derechos Humanos 2017, subrayó que el asesinato del padre Marcelo ha sido ampliamente condenado por la ciudadanía, por lo que urgió a las autoridades a realizar una investigación exhaustiva y eficaz para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.

“Desde 2015, el padre Marcelo era beneficiario de medidas cautelares por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), debido a los constantes riesgos que enfrentaba por su labor en la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas en Chiapas, especialmente en la región de Simojovel. A pesar de dichas medidas, el sacerdote fue víctima de un ataque mortal que, según la Fiscalía General de Chiapas, le quitó la vida de forma inmediata”, recordó.

El defensor del pueblo, Fierro Hernández agregó que el ministro de culto Marcelo Pérez Pérez era una figura ampliamente reconocida en la lucha por la justicia y los derechos de las comunidades indígenas. Su trabajo como mediador en conflictos inter e intracomunitarios y su constante denuncia de la violencia y el crimen organizado en la región lo convirtieron en un referente tanto a nivel local como internacional.

“El asesinato del sacerdote ha encendido las alarmas sobre la ineficacia de las medidas de protección que le habían sido otorgadas, por lo que lamentamos que, a pesar de las medidas implementadas, no se lograra garantizar la seguridad del padre Marcelo para mantenerlo con vida. El asesinato del Padre Marcelo es absolutamente inaceptable. Su labor era reconocida a nivel internacional, y las constantes denuncias sobre las amenazas que enfrentaba no fueron suficientes para evitar esta tragedia”, señaló.

El padre Marcelo no ha sido la única víctima en Chiapas. La violencia en la región ha cobrado numerosas vidas, especialmente entre quienes defienden los derechos humanos, desde 2017, se han registrado al menos 134 asesinatos de personas defensoras de derechos humanos en México, y siete de estos crímenes ocurrieron en lo que va del 2024, dijo Jesús Rey.

El abogado litigante, quien también preside el Bufete “BJF y Asociados”, expuso que, “en sus últimos años de vida, el padre Marcelo fue una voz clave en la lucha por la paz en Chiapas, denunciando el incremento de la violencia y exigiendo justicia para otros defensores asesinados, como Simón Pedro, otro activista por los derechos humanos en la región”.

“El padre Marcelo, como parte de su labor pastoral, lideró marchas y peregrinaciones por la paz en la región, denunciando la complicidad entre el crimen organizado y actores locales en los conflictos de tierras que afectan a las comunidades indígenas. Además, jugó un papel importante como mediador en los desplazamientos forzados de comunidades indígenas ante la creciente violencia”, subrayó Fierro Hernández. –sn–