Otra ejecución sacude la ciudad a menos de 24 horas de un ataque similar en la central de abastos

Por Martín García | Reportero

Un hombre fue asesinado a balazos este sábado por la tarde en la colonia Pueblo Nuevo, en Mazatlán. El ataque ocurrió alrededor de las 14:00 horas, cuando sujetos armados que viajaban en motocicleta interceptaron a la víctima en la calle Kena Moreno, cerca de un taller.

Testigos relataron que los agresores dispararon en varias ocasiones, causando que el hombre cayera al suelo inmediatamente. Paramédicos de Bomberos Veteranos llegaron al lugar poco después, pero al intentar reanimar a la víctima, ya no presentaba signos vitales.

Las autoridades locales, tras ser notificadas del ataque, procedieron a acordonar el área del crimen para preservar la escena. Se informó a la Vicefiscalía Regional Zona Sur, que envió a su equipo de peritos e investigadores para recabar las primeras evidencias del hecho violento.

Acordonan la zona y peritos comienzan las investigaciones

Los especialistas de la fiscalía realizaron las primeras diligencias en el lugar del ataque, mientras que agentes de investigación buscaron posibles testigos y cámaras de vigilancia cercanas que pudieran arrojar pistas sobre los agresores.

Este homicidio ocurre menos de 24 horas después de que otro hombre fuera ejecutado en Mazatlán. La víctima, un trabajador de la central de abastos, ubicada al norte de la ciudad, también fue atacada por sicarios, en un hecho que ha incrementado la preocupación entre los habitantes de la región.

En el caso más reciente, la identidad del hombre asesinado en Pueblo Nuevo aún no ha sido revelada. Sin embargo, fuentes cercanas indicaron que podría tratarse de un residente de la zona. Los vecinos se mostraron alarmados por la violencia en sus calles, un fenómeno que, según dicen, se ha vuelto más frecuente en los últimos meses.

Un patrón de violencia creciente en Mazatlán

El doble asesinato en menos de un día ha encendido las alarmas en Mazatlán, una ciudad que en los últimos tiempos ha visto un aumento significativo en los niveles de violencia, con ataques que parecen responder a venganzas o ajustes de cuentas entre grupos delictivos.

La presencia de motociclistas armados ha sido una constante en este tipo de homicidios, lo que hace pensar a las autoridades que se trata de operaciones coordinadas por células del crimen organizado. Este patrón ya ha sido identificado en ataques anteriores tanto en Mazatlán como en otras partes de Sinaloa. –sn–