La Fiscalía de Sinaloa avanza en las pesquisas tras el secuestro de un repartidor del diario, ocurrido pocas horas después de un ataque armado a su sede.

SN Redacción
La Fiscalía General del Estado de Sinaloa ha iniciado una investigación tras el secuestro de un empleado del periódico El Debate, ocurrido durante la mañana de este sábado en Culiacán. El trabajador fue interceptado por sujetos sospechosos, quienes lo persiguieron hasta que sufrió un accidente en su motocicleta y, en un intento por salvar su vida, se refugió en un negocio ubicado en el centro de la ciudad.

El secuestro del empleado se produjo tan solo 24 horas después de que las instalaciones de El Debate fueran atacadas a balazos. La situación se complicó cuando, mientras recibía atención médica por las heridas sufridas en la caída, los agresores lograron localizarlo nuevamente y procedieron a privarlo de su libertad.

Este evento ha generado una rápida respuesta por parte de la Fiscalía General de Sinaloa y de la policía de Investigación, quienes se trasladaron al lugar de los hechos para recabar información sobre la víctima y comenzar una investigación exhaustiva. Durante su intervención, el personal de las fuerzas de seguridad tomó fotografías de la zona donde tuvo lugar el ataque armado que involucró varios vehículos el pasado jueves por la noche.

Respuesta de las autoridades tras el incidente

El Secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, Gerardo Mérida Sánchez, también se presentó en el sitio para evaluar la situación y coordinar las acciones de protección necesarias tras estos violentos eventos. El Debate, a través de su sitio web, informó sobre la presencia de las autoridades en sus instalaciones y el inicio de las pesquisas.

El ataque armado contra el periódico y el secuestro del repartidor han generado preocupación entre los trabajadores del medio, así como en otros medios locales, debido a la escalada de violencia contra la prensa en la región. Las autoridades no han emitido un comunicado oficial con relación a posibles móviles detrás del ataque o si existen indicios que relacionen ambos eventos.

Los ataques contra medios de comunicación en México, en particular en estados como Sinaloa, han sido motivo de preocupación en los últimos años. El clima de inseguridad y la presencia de grupos delictivos organizados en la región han generado un entorno de alto riesgo para periodistas y trabajadores de la prensa. Las amenazas y agresiones físicas son, lamentablemente, una constante para quienes laboran en el sector.

Ataques a la prensa: un patrón preocupante

El reciente ataque contra El Debate y el secuestro de su empleado son un reflejo más de la crisis de seguridad que afecta al estado. Sinaloa, conocido por ser uno de los territorios con mayor presencia de cárteles de la droga, ha sido testigo de un aumento en los hechos violentos que, en muchos casos, involucran a sectores clave como el periodismo.

La persecución de periodistas y empleados de medios de comunicación en el estado ha despertado el interés de organizaciones defensoras de la libertad de prensa. Estas han exigido mayor protección y respuestas más contundentes por parte del gobierno local y federal.

La comunidad periodística local y nacional ha condenado este nuevo ataque contra la libertad de prensa y ha solicitado que se tomen medidas inmediatas para garantizar la seguridad. –sn–