Descubren centro de tortura en oficinas del Sindicato de Taxistas en Quintana Roo

Cateo de la FGE y SSyPC revela pruebas de tortura y presunto narcomenudeo en instalaciones sindicales.

SN Redacción

En un operativo conjunto, la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) llevaron a cabo un cateo en las oficinas del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo”. Durante el allanamiento, las autoridades encontraron pruebas que indican que el lugar era utilizado como un centro de tortura.

El cateo resultó en el aseguramiento de equipos de cómputo, discos duros, memorias USB y teléfonos celulares. Además, se incautaron presuntas sustancias ilegales y equipo de almacenamiento de video, elementos clave en las investigaciones en curso.

Investigación por Homicidios de Taxistas

La intervención se realizó en el marco de las investigaciones para esclarecer el asesinato de dos taxistas, ocurrido el 12 de septiembre, así como el de un colaborador del sindicato, el pasado 25 de octubre. Ambos incidentes han generado preocupación en la comunidad y entre los trabajadores del sector.

Dentro de la oficina, los agentes hallaron más elementos de prueba, incluidas dosis de presuntas drogas y cartuchos útiles de diversos calibres. Estos hallazgos refuerzan las sospechas de actividades ilícitas en las instalaciones sindicales.

Detención del Dirigente Salomón “N”

Las autoridades detuvieron a Salomón “N”, alias “Mafer”, señalado como el principal sospechoso de los homicidios y de dirigir el centro de tortura. En su oficina se encontraron evidencias de narcóticos y armas, las cuales quedaron bajo resguardo de la FGE.

Además de los objetos incautados, trabajadores del sindicato han declarado ante el Ministerio Público, describiendo los supuestos actos de tortura presenciados en el lugar. Estas declaraciones resultan fundamentales para avanzar en la línea de investigación de los tres homicidios.

Sospechas y Denuncias Anteriores

Diversos testimonios señalan que los actos de violencia eran conocidos entre los integrantes del sindicato, aunque no habían sido denunciados por miedo a represalias. La operación de las autoridades expone una problemática que había permanecido oculta.

La FGE indicó que la oficina, en la cual se presume ocurrieron estos actos, fue asegurada por los agentes al finalizar el cateo. Los sellos de resguardo fueron colocados para garantizar que el sitio quede bajo custodia de las autoridades competentes. –sn–