Con 87 votos a favor, el Senado de la República otorgó un segundo periodo a la titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para el periodo 2024-2029
Por Martín García | Reportero
En una sesión que se extendió hasta la madrugada, el Senado de la República aprobó la reelección de Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). La votación, marcada por tensiones entre los partidos oficialistas y la oposición, concluyó tras casi doce horas de debate.
Con un total de 127 votos emitidos, Piedra Ibarra logró la mayoría calificada al sumar 87 votos a su favor, frente a 36 para Nashieli Ramírez y uno para Paulina Hernández Diz. Tres boletas resultaron nulas, lo que dio fin a una jornada legislativa que inició el martes a mediodía y concluyó pasadas las 2:00 de la mañana del miércoles.
Desde el arranque de la sesión, el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, indicó que los partidos del bloque oficialista estaban cerca de un acuerdo para respaldar la reelección de Rosario Piedra. En su discurso inicial, Fernández Noroña subrayó que Piedra representaba una figura «probada y comprometida».
El proceso de votación y tensiones internas
No obstante, diversos reporteros y analistas señalaron en redes sociales que el retraso en la sesión se debía a tensiones entre los legisladores de Morena, Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido del Trabajo (PT). Fuentes parlamentarias aseguraron que algunos senadores de Morena expresaron dudas sobre la reelección.
Uno de los opositores a la decisión fue el senador morenista Javier Corral, quien públicamente manifestó su desacuerdo. «He expresado a mis compañer@s mi respeto por esa decisión, pero no la comparto», afirmó Corral en redes sociales, revelando así una división en la bancada.
Días antes, la presencia de Rosario Piedra en la terna generó controversia, ya que no figuraba entre los cinco perfiles mejor evaluados por las comisiones. Según Javier Corral, su inclusión respondió a presiones internas del oficialismo, situación que avivó el descontento entre algunos legisladores.
Inconformidad por la inclusión de Piedra en la terna
La terna final estuvo conformada por Rosario Piedra Ibarra, Nashieli Ramírez Hernández y Paulina Hernández Diz, lo que, según Corral, obedeció a la insistencia de quienes apoyaban la continuidad de Piedra. Esta situación desató cuestionamientos entre grupos de derechos humanos.
Incluso, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, fue cuestionada sobre la inclusión de Piedra. Sheinbaum sostuvo que la terna era responsabilidad exclusiva del Senado y reiteró su respaldo a la labor de Piedra Ibarra en la CNDH.
La postura de organizaciones de derechos humanos
Diferentes organizaciones de derechos humanos expresaron su oposición a la reelección de Rosario Piedra, señalando deficiencias en su gestión. El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) denunció una falta de independencia de la CNDH, reflejada en su bajo número de recomendaciones a la Guardia Nacional y la SEDENA.
En redes sociales, los colectivos Fundar y Documenta AC coincidieron en que la reelección de Piedra Ibarra era una «grave señal de desprecio» hacia la defensa de los derechos humanos. Estos grupos reiteraron su exigencia de un perfil independiente al frente de la Comisión.
«La CNDH que queremos protege a las personas, no al poder», declararon en redes sociales. «Necesitamos un perfil independiente que frene la impunidad y haga valer la justicia», señalaron las organizaciones, en clara alusión a la actual titular. –sn–
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