Un pasajero argumentó recibir amenazas de muerte durante el trayecto
Por Paola Ramírez | Reportera
Un vuelo 3052 de la aerolínea Volaris, que cubría la ruta Bajío-Tijuana, realizó un aterrizaje de emergencia este domingo en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara, tras un intento de desvío hacia Estados Unidos por parte de un pasajero identificado como Mario “N”, de 31 años. Según el informe oficial, el hombre agredió a una sobrecargo e intentó ingresar a la cabina de pilotos bajo el argumento de amenazas de muerte relacionadas con el secuestro de un familiar.
Testigos relataron que el incidente inició poco después del despegue desde León, Guanajuato, cuando Mario “N” mostró un comportamiento errático al recibir un mensaje amenazante. Ante el peligro, la tripulación activó los protocolos de seguridad y logró someter al pasajero. El piloto emitió un código de alerta, priorizando la seguridad de los 150 pasajeros a bordo, y aterrizó en Guadalajara donde elementos de la Guardia Nacional detuvieron al hombre.
¿Quién es Mario “N”?
De acuerdo con información preliminar, Mario “N” viajaba acompañado de su esposa y dos hijos menores de edad. Fue informado de sus derechos antes de ser puesto a disposición del Ministerio Público Federal. La Fiscalía General de la República (FGR) abrió una carpeta de investigación para determinar su situación legal, considerando las circunstancias del incidente.
En un comunicado, Volaris aseguró que el resto de los pasajeros y la tripulación reanudaron el vuelo hacia Tijuana sin más inconvenientes. La aerolínea reafirmó su compromiso con la seguridad de sus usuarios y adelantó que colaborará con las autoridades para garantizar que el caso sea resuelto conforme a la ley.
Protocolos de seguridad ante el aumento de incidentes
Este evento se suma a otros incidentes recientes que han puesto a prueba la seguridad aérea en México. Las autoridades destacaron la importancia de los protocolos establecidos, que permitieron una rápida actuación del personal de vuelo en este caso.
Pasajeros relataron momentos de tensión durante el vuelo. Algunos describieron haber notado el nerviosismo del hombre antes del altercado, mientras otros agradecieron la actuación de la tripulación y la Guardia Nacional. La situación generó debate en redes sociales sobre los protocolos de seguridad en los vuelos comerciales.
Las investigaciones determinarán si el acusado actuó bajo una amenaza real o si su conducta responde a otros factores. Por su parte, expertos en seguridad han solicitado revisar y fortalecer los controles para prevenir situaciones similares. –sn–

