El secretario de Economía alertó sobre el daño que sufrirían consumidores y empresas en EU.

Por Paola Ramírez | Reportera

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, advirtió que los aranceles del 25 por ciento propuestos por el expresidente Donald Trump a productos mexicanos generarían una crisis en el mercado estadounidense.

Ebrard calificó la medida como un “error estratégico”, ya que México es el principal proveedor de bienes esenciales para Estados Unidos. La imposición de estos impuestos, afirmó, encarecería productos básicos y afectaría la cadena de suministros.

El funcionario explicó que el impacto sería inmediato y recaería sobre millones de consumidores en Estados Unidos, quienes pagarían precios más altos por frutas, verduras, carnes, electrónicos y automóviles.

El aumento de costos alcanzaría miles de millones de dólares en sectores clave de la economía estadounidense. Ebrard subrayó que los efectos no solo serían inflacionarios, sino que también afectarían la producción de empresas automotrices.

El gobierno de México, dijo, buscará evitar que esta política avance, privilegiando el diálogo y la cooperación comercial con Washington.

Consumidores estadounidenses pagarían la factura

Según Ebrard, los aranceles propuestos por Trump encarecerían de inmediato productos como autos, refrigeradores y pantallas.

El secretario explicó que los consumidores en Estados Unidos enfrentarían un incremento del 25% en bienes esenciales. “El impacto será directo en el bolsillo de millones de familias”, aseguró.

Más de 5 millones de hogares estadounidenses gastarían más en electrodomésticos fabricados en México. Además, el costo de frutas, verduras y carnes se dispararía en supermercados.

Los sectores tecnológicos y automotrices sufrirían una crisis de costos, afectando a compradores y productores por igual. Las pantallas, computadoras y autopartes verían incrementos que superarían los 10 mil millones de dólares.

Ebrard enfatizó que la medida tendría consecuencias negativas incluso para empresas estadounidenses, cuya producción depende de insumos mexicanos.

México, pieza clave en la economía de EE.UU.

México es uno de los principales exportadores de electrónicos y automóviles a Estados Unidos. Ebrard destacó que 1 de cada 3 refrigeradores en ese país proviene de fábricas mexicanas.

El secretario explicó que los costos adicionales por aranceles afectarían gravemente la competitividad del mercado. “Se trata de una dependencia estructural que no puede romperse sin consecuencias”, afirmó.

Las cadenas de suministro en sectores clave como el automotriz sufrirían interrupciones que generarían escasez y desempleo.

El impacto en la industria de autopartes representaría pérdidas millonarias para las ensambladoras de autos en Estados Unidos.

México, insistió Ebrard, no es solo un proveedor, sino un socio comercial indispensable para la economía estadounidense.

Pérdidas millonarias y presión inflacionaria

El secretario de Economía estimó que las familias estadounidenses enfrentarían costos adicionales de más de 10 mil millones de dólares en la compra de automóviles.

El aumento en el precio de computadoras alcanzaría 7 mil millones de dólares, afectando a 52 millones de hogares.

En el caso de las pantallas, el impacto sería de 2 mil 397 millones de dólares, golpeando a más de 30 millones de familias.

Ebrard subrayó que el alza de precios generaría presiones inflacionarias en Estados Unidos. “Esta política afectará tanto a consumidores como a productores”, advirtió.

Las empresas que dependen de insumos mexicanos sufrirían dificultades para mantener sus costos y producción. –sn–