Ejecutado con 15 disparos en estacionamiento de Plaza Antigua
Por Mireya Estrada | Corresponsal
El narcotraficante holandés Marco Ebben, presunto socio de Ismael «El Mayo» Zambada, fue asesinado en Atizapán de Zaragoza, estado de México.
El ataque ocurrió este jueves en el estacionamiento de Plaza Antigua, cuando la víctima se dirigía a su camioneta blindada.
Testigos reportaron que varios hombres armados lo interceptaron y abrieron fuego en su contra.
Los agresores dispararon en al menos 15 ocasiones antes de huir del lugar sin dejar rastro.
Autoridades federales investigaban a Marco Ebben por su papel en el trasiego de droga hacia Europa.
Narco buscado por la Interpol fingió su muerte varias veces
Medios internacionales informaron que Marco Ebben había fingido su muerte en distintas ocasiones.
El capo utilizaba identidades falsas para evadir la persecución de las autoridades.
Interpol lo tenía en la mira por su presunta participación en operaciones de tráfico de cocaína.
Fuentes policiales señalaron que mantenía una estructura operativa en México y Países Bajos.
Su vínculo con el cártel de Sinaloa lo convirtió en un objetivo prioritario para agencias de seguridad.
Balacera en Atizapán movilizó a la Marina y fuerzas estatales
Vecinos de la zona alertaron a las autoridades tras escuchar las detonaciones.
Elementos de la Policía Municipal de Atizapán y la Marina llegaron al sitio para acordonar la escena.
Peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) iniciaron las investigaciones.
El área quedó resguardada mientras se realizaban las diligencias correspondientes.
Testigos describieron que los sicarios actuaron de manera rápida y organizada.
Investigación apunta a posible ajuste de cuentas
Autoridades no descartan que el asesinato de Marco Ebben responda a una disputa entre cárteles.
La posibilidad de una traición dentro de la organización también es considerada.
El narcotraficante mantenía nexos con operadores criminales en distintos continentes.
Su asesinato ocurrió en un contexto de creciente violencia ligada al crimen organizado.
El modus operandi sugiere que el ataque fue planeado con antelación.
Marco Ebben habría vivido oculto en una finca en Atizapán
Investigaciones preliminares indican que Marco Ebben residía en una finca en Atizapán.
El inmueble servía como refugio para evitar ser detectado por las autoridades.
Agentes de inteligencia rastreaban sus movimientos desde hace meses.
Su muerte representa un golpe dentro de las redes de tráfico internacional de drogas.
Hasta el momento, no hay detenidos por el crimen ocurrido en el estado de México. –sn–

