El 18 de marzo se publicarán las leyes secundarias en el Diario Oficial
Por Paola Ramírez | Reportera
La presidente Claudia Sheinbaum Pardo confió en que la reforma energética que revertirá buena parte de la legislación de 2013 quedará aprobada antes del 18 de marzo.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, pidió a los legisladores avalar las leyes secundarias que consolidarán los cambios en Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Sheinbaum explicó que la modificación legislativa busca regresar ambas empresas al control del Estado para fortalecer la soberanía energética.
“Espero que el 18 de marzo podamos estar firmando estas leyes. El objetivo es revertir prácticamente la reforma de 2013, que tenía como propósito desaparecer Pemex y CFE”, afirmó.
Pemex y CFE dejarán de ser empresas productivas del Estado
La mandataria explicó que el nuevo marco normativo eliminará la figura de “empresa productiva del Estado” para devolver a Pemex y CFE su carácter público.
Sheinbaum criticó que la reforma energética de 2013 debilitó la capacidad operativa de ambas compañías al someterlas a un modelo de competencia con el sector privado.
“El resultado fue que CFE producía menos electricidad y Pemex refinaba menos combustibles, además de que lo endeudaron. Gran parte del problema estuvo vinculado con corrupción”, señaló.
El pasado 30 de octubre, la presidenta firmó un decreto para establecer la nueva estructura de ambas entidades tras la aprobación de la reforma en el Congreso de la Unión.
El regreso de Pemex y CFE al control estatal
La secretaria de Energía, Luz Elena González Escobar, subrayó que la reforma energética de 2024 corrige las fallas del modelo anterior.
Explicó que los cambios constitucionales modificaron los artículos 25, 27 y 28, con lo que se otorga a Pemex y CFE el carácter de Empresas Públicas del Estado.
González indicó que la medida permitirá garantizar la seguridad energética del país y facilitar el acceso de la población a servicios básicos.
“No podemos permitir que nuestros recursos sean considerados una mercancía, como ocurrió con la reforma de 2013”, declaró.
El impacto de la reforma en el sector energético
La administración de Sheinbaum aseguró que el fortalecimiento de Pemex y CFE traerá estabilidad en el suministro de combustibles y electricidad.
La eliminación del esquema anterior dará prioridad a la inversión pública en infraestructura energética sin la intermediación de empresas privadas.
Analistas han advertido que la nueva reforma podría generar tensiones con inversionistas extranjeros que operan en el sector eléctrico.
El gobierno sostiene que la medida permitirá mejorar las condiciones de acceso a energía a precios justos para la población.
Sheinbaum defiende la nueva política energética
La presidenta argumentó que el objetivo central de la reforma es garantizar la soberanía y seguridad energética del país.
El Estado mexicano asumirá el control total de la generación, distribución y comercialización de electricidad a través de CFE.
En el sector de hidrocarburos, Pemex tendrá prioridad en la exploración y refinación para reducir la dependencia de combustibles importados.
El gobierno ha descartado la posibilidad de indemnizar a empresas privadas afectadas por los cambios en el marco regulatorio.
Expectativas rumbo al 18 de marzo
La iniciativa ha generado respaldo dentro del movimiento oficialista, mientras que sectores empresariales han manifestado inquietudes sobre sus alcances.
Legisladores de Morena han expresado su respaldo al proyecto y afirmaron que garantizarán su aprobación en ambas cámaras.
El sector privado ha pedido claridad sobre el impacto que tendrán las nuevas reglas en las inversiones ya realizadas en el país.
El gobierno de Sheinbaum confía en que la publicación de la reforma en el Diario Oficial de la Federación marcará un punto de inflexión en el sector energético. –sn–

