Tuzos falló en su intento por clasificar de manera directa a la fase final; Atlético San Luis fue certero y aprovechó los errores defensivos del visitante
Por Eric Gómez | Reportero
El equipo de Pachuca fracasó en su intento de sellar el pase directo a la liguilla del Clausura 2025 tras perder 2-1 ante Atlético San Luis en el Estadio Alfonso Lastras. Con el resultado, los dirigidos por Guillermo Almada tendrán que disputar el play-in, y lo harán en calidad de visitantes.
La escuadra hidalguense llegó a la última jornada con la necesidad de vencer a San Luis y esperar que León no ganara ante Monterrey. Sin embargo, ninguno de los dos escenarios se cumplió y los Tuzos tendrán que buscar su boleto en una instancia más complicada.
Pese a tener mayor posesión y oportunidades, Pachuca no logró concretar sus llegadas. Incluso, un gol fue anulado al minuto 6 tras revisión del VAR, lo que marcó la tónica de un primer tiempo estéril en cuanto a anotaciones.
El equipo local, por su parte, resistió con orden y fue creciendo en intensidad durante la segunda mitad. La entrada del argentino Mateo Klimowicz le dio mayor volumen ofensivo a los potosinos.
San Luis fue letal en la segunda parte
Fue al minuto 71 cuando Óscar Macías sorprendió con un disparo lejano que venció al arquero Carlos Moreno, abriendo el marcador a favor de los locales. A pesar del golpe anímico, Pachuca logró recomponerse.
Al 79, Illian Hernández consiguió empatar el partido con una definición que devolvió la esperanza a los Tuzos, quienes aún veían posible el milagro de la clasificación directa a la liguilla.
No obstante, el cuadro hidalguense no supo manejar el momento y al minuto 86 cometió un error defensivo que fue capitalizado por Román Torres, quien puso el 2-1 definitivo.
Como si no fuera suficiente, un minuto después el mediocampista Javier Eduardo López recibió la tarjeta roja, dejando a su equipo con diez hombres y sentenciando su destino.
Una temporada que terminó en frustración parcial
El equipo de Guillermo Almada cerró la fase regular con 28 puntos, ubicándose en la octava posición de la tabla. Eso significa que deberá disputar el play-in, sin la ventaja de jugar en casa.
Por su parte, Atlético San Luis finalizó el torneo con apenas 18 unidades, en la decimoquinta posición. A pesar del resultado, su campaña fue decepcionante y no les alcanzó para clasificar a la fase final.
El triunfo ante Pachuca solo sirvió como una ligera reivindicación para una afición que vio cómo su equipo naufragó durante gran parte del campeonato.
Monterrey venció 2-0 a León, resultado que terminó por eliminar cualquier posibilidad matemática de los Tuzos para avanzar directamente a la siguiente fase.
A pesar de sus aspiraciones y el talento joven mostrado en varios encuentros, Pachuca no pudo concretar los resultados clave para afianzarse como protagonista.
Los Tuzos, obligados a recomponer el camino en Monterrey
El próximo reto será a partido único y fuera de casa, lo que representa un doble desafío para un conjunto que mostró irregularidad en la recta final del torneo.
Guillermo Almada deberá corregir los errores defensivos y recuperar la confianza del grupo si quiere mantener vivas las aspiraciones al título.
El rendimiento de elementos como John Kennedy, Elías Montiel e Illian Hernández será determinante para que los Tuzos puedan avanzar en la fase de reclasificación.
El fracaso ante un rival como San Luis, que tuvo un torneo para el olvido, dejó en evidencia las carencias de Pachuca para resolver bajo presión.
La ausencia de contundencia y la falta de liderazgo en momentos clave marcaron la diferencia en un encuentro que parecía controlado en varios tramos.
Atlético San Luis cerró con dignidad una temporada gris
Para el equipo potosino, la victoria sirvió como una pequeña reivindicación. Con 18 puntos y sin posibilidades de clasificar, el triunfo fue más moral que deportivo.
La actuación de Óscar Macías y el ingreso oportuno de Klimowicz ofrecieron destellos de un equipo que necesita una profunda reestructuración.
El técnico del conjunto local, cuyo nombre aún no ha sido confirmado para la próxima campaña, tiene mucho por trabajar de cara al siguiente torneo.
En contraste, el cuadro hidalguense tiene poco margen de error si pretende trascender. El play-in representa una última oportunidad, pero también una ruta más incierta.
La presión ahora se centrará en la dirigencia y el cuerpo técnico, quienes deberán ofrecer soluciones inmediatas ante un cierre decepcionante. –sn–

