La presidente de México desmintió las declaraciones del presidente Daniel Noboa, quien atribuyó amenazas terroristas a presuntos grupos provenientes del país norteamericano.

Por Paola Ramírez | Reportera                                                       

Durante su conferencia matutina, Claudia Sheinbaum Pardo rechazó enérgicamente las acusaciones del gobierno de Ecuador, en las que se implicó a México como origen de un presunto ataque terrorista contra el presidente Daniel Noboa.

La mandataria calificó de infundadas las versiones difundidas por las fuerzas armadas ecuatorianas, quienes aseguraron que sicarios fueron trasladados desde México para atentar contra autoridades sudamericanas.

A través de un documento con fecha del 17 de abril de 2025, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador (Comaco) notificó la existencia de posibles amenazas en contra del mandatario y de su gabinete ministerial.

La información fue difundida por el ministro de Gobierno ecuatoriano, José de la Gasca, quien confirmó los hechos al medio local El Universo, atribuyendo la alerta a presuntos grupos criminales internacionales.

México rechaza las versiones oficiales de Ecuador

Desde Palacio Nacional, Sheinbaum Pardo reiteró el compromiso de su administración con la soberanía nacional y con los principios de no intervención en los asuntos internos de otras naciones.

Durante “La Mañanera del Pueblo”, la titular del Ejecutivo lamentó que se recurra a narrativas sin pruebas ni fuentes verificables para imputar hechos tan graves a ciudadanos o instituciones mexicanas.

La mandataria reafirmó el respaldo de su gobierno a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), cuya postura oficial también negó categóricamente las imputaciones realizadas por el gobierno ecuatoriano.

El documento presentado por las autoridades sudamericanas no precisó nombres ni mostró evidencia sobre el presunto traslado de sicarios desde México o cualquier otro país de la región.

La SRE denunció filtraciones y fabricación de narrativas

De acuerdo con la postura difundida por la SRE, el Gobierno de México rechazó lo que consideró como la “creación reiterada e inescrupulosa de narrativas” que buscan involucrar a México en asuntos internos de Ecuador.

La cancillería acusó filtraciones deliberadas de documentos oficiales sin sustento, lo que representa un uso indebido de las relaciones diplomáticas para construir discursos políticos.

“México jamás ha promovido ni ha sido fuente de amenazas o actos que atenten contra la estabilidad de otras naciones”, apuntó el comunicado de la cancillería mexicana, leído por la jefe del Ejecutivo.

La postura fue ratificada durante la conferencia de prensa por Sheinbaum Pardo, quien reiteró el rechazo a cualquier insinuación que vincule al país con grupos armados o redes criminales trasnacionales.

Ruptura de relaciones, antecedente del conflicto diplomático

Cabe recordar que la crisis diplomática entre México y Ecuador tuvo origen el pasado 5 de abril de 2024, cuando fuerzas de seguridad ecuatorianas irrumpieron en la embajada mexicana en Quito.

El operativo se ejecutó con el objetivo de detener al ex vicepresidente Jorge Glas, quien se encontraba bajo protección diplomática tras recibir asilo político por parte del gobierno mexicano.

El ingreso violento a la sede diplomática provocó una condena internacional y fue calificado como una “violación al derecho internacional” por parte del gobierno mexicano.

Como respuesta inmediata, la Secretaría de Relaciones Exteriores ordenó el retiro del personal diplomático de Ecuador, dando fin a las relaciones formales con el gobierno de Daniel Noboa.

Principio de no intervención guiará postura de México

Durante su comparecencia ante los medios, Sheinbaum Pardo reiteró que México no cederá ante provocaciones ni responderá con hostilidad a las versiones emitidas por autoridades extranjeras.

“Nos mantendremos firmes en el respeto irrestricto al derecho internacional y al principio de no intervención, aún frente a actos hostiles o injustificados”, aseguró la presidente mexicana.

Además, invitó a la comunidad internacional a valorar con responsabilidad los comunicados que emitan los gobiernos, especialmente aquellos que puedan tener implicaciones en la estabilidad regional.

De igual manera, exhortó a Daniel Noboa a presentar pruebas si las tuviera, o a rectificar las declaraciones que implican a México como responsable de amenazas terroristas en su país.

Llamado al diálogo y la cooperación regional

La mandatario mexicana subrayó que los lazos entre naciones deben construirse a través del diálogo y el respeto mutuo, no mediante acusaciones carentes de sustento.

“México ha sido históricamente una nación promotora de la paz y la cooperación internacional”, sostuvo Sheinbaum, quien pidió no enrarecer el ambiente con señalamientos irresponsables.

La posición del gobierno mexicano fue avalada por expertos en relaciones internacionales, quienes coincidieron en que las afirmaciones del Comaco carecen de base sólida.

Por su parte, la oposición política en México pidió al Ejecutivo federal mantener firmeza y exigir una disculpa pública de parte del gobierno de Ecuador.

Ecuador no ha mostrado pruebas de sus acusaciones

Hasta el momento, ni el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador ni el presidente Daniel Noboa han ofrecido pruebas documentales que validen la supuesta amenaza proveniente de México.

Organismos de derechos humanos también alzaron la voz ante la ligereza con que se relaciona a un país con actos de terrorismo sin respaldo técnico o jurídico.

La comunidad internacional observó con preocupación el deterioro de las relaciones diplomáticas entre dos países latinoamericanos con tradición de cooperación mutua.

Las acusaciones de Ecuador podrían afectar futuras colaboraciones bilaterales, particularmente en temas de comercio, migración y seguridad regional.

El gobierno mexicano mantendrá su postura institucional

Por ahora, el gobierno de Claudia Sheinbaum se enfocará en preservar la estabilidad institucional y en defender la imagen internacional del país frente a estos embates.

México continuará su defensa en foros multilaterales y hará valer el derecho internacional como instrumento para resolver diferencias diplomáticas.

“No caeremos en provocaciones. Nuestro país se mantendrá firme en la defensa de su soberanía y en el cumplimiento del derecho internacional”, concluyó la jefe del Ejecutivo.

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