Líderes mundiales se congregan en el Vaticano para despedir al papa Francisco

SN Redacción

El Vaticano alberga uno de los eventos más significativos de la historia contemporánea: el funeral del papa Francisco. La Plaza de San Pedro reunió a miles de personas y a más de medio centenar de líderes mundiales.

La Santa Sede informó que la ceremonia inició a las 10:00 horas, con un clima de recogimiento y solemnidad. Miles de fieles se congregaron desde la madrugada en los alrededores del Vaticano para presenciar el sepelio.

A la ceremonia asistieron aproximadamente 50 jefes de Estado y de Gobierno, así como 10 monarcas europeos. Se trató de la despedida más multitudinaria a un pontífice en el siglo XXI.

La Basílica de Santa María La Mayor, donde el papa fue finalmente sepultado, permaneció custodiada por elementos de la Guardia Suiza y fuerzas de seguridad italiana.

Trump, Milei y Macron entre los asistentes de alto perfil

Entre los asistentes más reconocidos figuró Donald Trump, expresidente de Estados Unidos, quien viajó en compañía de su esposa. Desde su llegada, generó atención mediática.

También viajó a Roma Javier Milei, presidente de Argentina, país natal del papa, quien ofreció palabras de respeto por su legado espiritual y social.

Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, encabezó la delegación sudamericana, acompañado de ministros y líderes religiosos de su país.

El presidente francés Emmanuel Macron compartió un breve mensaje con los medios, en el que alabó la “capacidad del papa para unir a los pueblos desde la humildad”.

Una ceremonia marcada por unidad diplomática y religiosa

Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, se presentó en medio de su gira por Europa, y saludó brevemente a representantes rusos presentes en el acto litúrgico.

También acudió el presidente alemán Frank Walter Steinmeier, acompañado del canciller federal. Representaron al pueblo alemán en un momento de reflexión y diálogo ecuménico.

Andrzej Duda, presidente de Polonia, viajó junto con autoridades católicas de su país. Recordó los vínculos del pontífice con su predecesor, Juan Pablo II.

La jefa de Gobierno de Italia, Giorgia Meloni, acompañó al presidente Sergio Mattarella. Ambos encabezaron el acto en representación del Estado anfitrión.

Presencia de la realeza europea consolida carácter histórico

Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, ocuparon un lugar privilegiado durante la ceremonia, como símbolo del respeto histórico de la monarquía española al Vaticano.

El príncipe Guillermo representó al rey Carlos III del Reino Unido. Se reunió con representantes del clero británico y saludó al clero vaticano.

También acudieron los monarcas de Mónaco y Bélgica, quienes firmaron el libro de condolencias dispuesto en la entrada de la basílica.

La jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, António Costa, acudieron en nombre de la Unión Europea.

Seguridad reforzada ante la concentración de dignatarios

El Gobierno italiano implementó un dispositivo de seguridad sin precedentes. Se desplegaron más de 4 mil efectivos en la ciudad y sus accesos.

Aviones Eurofighter de la Fuerza Aérea Italiana patrullaron el espacio aéreo desde la noche anterior al evento. Se prohibió el uso de drones en la capital.

Aeropuertos y estaciones de tren operaron con controles excepcionales. Se establecieron zonas de exclusión para garantizar la seguridad diplomática.

Unidades especializadas rastrearon explosivos y vigilaron concentraciones masivas. La operación fue supervisada por el Ministerio del Interior italiano.

Francisco: un pontífice de puertas abiertas

El papa Francisco, nacido como Jorge Mario Bergoglio, se convirtió en el primer pontífice latinoamericano de la historia, tras su elección en 2013.

Durante su pontificado, impulsó una agenda centrada en la justicia social, la lucha contra el cambio climático y la inclusión de los sectores más vulnerables.

Mantuvo un diálogo abierto con otras religiones y visitó países en conflicto como Siria, Irak y Sudán del Sur, promoviendo la paz en cada encuentro.

A lo largo de más de una década, se mantuvo cercano a migrantes, indígenas, víctimas de abuso clerical y comunidades excluidas de la sociedad.

Funeral multitudinario marcó un antes y un después

El funeral del papa Francisco fue seguido en tiempo real por millones de personas a través de transmisiones televisivas y plataformas digitales.

La homilía fue pronunciada por el decano del Colegio Cardenalicio, quien subrayó el carácter humilde y pastoral del pontífice fallecido.

Miles de peregrinos abarrotaron la Plaza de San Pedro. Muchos de ellos llegaron caminando desde otras ciudades italianas o países vecinos.

El féretro fue conducido en procesión hasta la Basílica de Santa María La Mayor, donde reposan ahora los restos del pontífice argentino.

Un legado que perdurará en el tiempo

El Vaticano confirmó que la tumba de Francisco podrá ser visitada por el público a partir del próximo lunes, con acceso limitado por razones de seguridad.

Se organizarán celebraciones litúrgicas en su memoria durante los próximos treinta días, siguiendo el calendario de luto vaticano.

Analistas internacionales coincidieron en que su pontificado representó un punto de inflexión en la relación entre la Iglesia y la política global.

Líderes de distintas religiones emitieron condolencias formales, reconociendo el liderazgo espiritual de un hombre que promovió el diálogo universal. –sn–