La emblemática casa gastronómica abre nueva sede y renueva su legado con cuarta generación al frente
Por Deyanira Vázquez | Reportera
Con más de un siglo de historia a cuestas, el restaurante taurino El Taquito abrió su nueva sede en la colonia San José Insurgentes. La familia Guillén presentó el nuevo local ubicado en Miguel Noreña No. 25, en la alcaldía Benito Juárez.
Durante la conferencia, reafirmaron que la casa gastronómica “sigue viva” y con la misma esencia de siempre. Marcos Guillén Hernández, tercera generación del negocio, explicó que el cierre de la sede del Centro Histórico no significó el fin.
La salida del local en Carmen 69 obedeció a causas ajenas a la familia, señaló el empresario restaurantero. Aclaró que el sabor, el espíritu taurino y la hospitalidad tradicional se mantienen intactos en esta nueva etapa. “La historia no se interrumpe, se transforma”, afirmó ante los medios de comunicación.
La cuarta generación toma el relevo
El cambio de sede marcó también una renovación en la dirección del restaurante, con nuevos rostros al frente. Carla Guillén Mayen, como chef ejecutiva, y Rafael Guillén Caracheo Jr., como responsable administrativo, asumieron el liderazgo.
Ambos estarán respaldados por Marcos y Rafael Guillén Hernández, quienes fungirán como supervisores del proyecto. “Es momento de ceder la batuta”, expresó Marcos, “ellos sabrán cuidar el alma del Taquito”.
Un sitio con sabor a historia
Fundado en 1917, El Taquito ha sido epicentro de encuentros históricos, políticos y culturales por generaciones. Figuras como Adolfo López Mateos, María Félix y Cantinflas formaron parte de su clientela distinguida.
También asistieron toreros de renombre, intelectuales, periodistas y deportistas legendarios. Incluso Jacobo Zabludovsky lo describió como “una institución del sabor mexicano”.
Cocina que evoluciona sin olvidar el origen
La chef Carla Guillén Mayen explicó que la carta mantiene recetas tradicionales y apuesta por nuevas propuestas. Entre los platillos figuran croquetas de chicharrón prensado, sopecitos de tuétano y albóndigas de huauzontle.
También se integraron preparaciones innovadoras como el aguachile de cecina de res y el pastel azteca estilo Guillén Mayen. “El sabor sigue siendo el eje, pero ahora con mirada contemporánea”, detalló la chef.
Una nueva sede, la misma esencia
La nueva ubicación en San José Insurgentes ofrece un ambiente cálido, familiar y festivo, señaló Rafael Jr. El restaurante incorporó música en vivo, coctelería de autor y ambientación inspirada en la tauromaquia nacional.
Cada detalle busca recrear la experiencia única que ha definido a El Taquito desde hace más de 100 años. “Nuestro compromiso es conservar lo que nos hace únicos y compartirlo con nuevas generaciones”, expresó.
Compromiso con el legado y el futuro
La familia Guillén reiteró su intención de seguir contando historias a través del sazón y la hospitalidad. Aseguraron que esta etapa marca el inicio de un nuevo capítulo que mantendrá vivo el legado fundacional.
Más allá de ser un restaurante, dijeron, El Taquito es parte de la identidad cultural y culinaria del país. “La historia continúa y queremos que todos sean parte de ella”, finalizó Carla Guillén. –sn–

