Sheinbaum reprueba la reforma judicial de Zedillo

Por Paola Ramírez | Reportera

En su habitual conferencia de prensa matutina, Claudia Sheinbaum reprobó la reforma al Poder Judicial que promovió el expresidente Ernesto Zedillo en 1994. Señaló que ese modelo excluyó a la ciudadanía del proceso para elegir a los ministros de la Suprema Corte.

La presidente afirmó que, durante ese sexenio, el Ejecutivo Federal elegía una terna de candidatos. Luego, el Senado debía escoger entre esas opciones, y si no había acuerdo, el titular del Ejecutivo decidía de manera directa.

En contraste, Sheinbaum Pardo defendió el nuevo proceso promovido por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, mediante el cual se realizará una elección directa de integrantes del Poder Judicial de la Federación.

“Antes decidían unos cuantos; ahora decide el pueblo”, expresó la mandataria durante la conferencia ofrecida este martes desde Palacio Nacional.

Defendió elección directa de jueces y magistrados

Sheinbaum enfatizó que el proceso del próximo 1° de junio representará una transformación estructural en la vida pública de México. Afirmó que la ciudadanía tendrá voz en la designación de ministros, jueces y magistrados.

“La gran diferencia es que ahora el pueblo podrá decidir quién debe impartir justicia”, aseguró. Recalcó que esa participación ciudadana forma parte de los avances democráticos impulsados desde el movimiento de la Cuarta Transformación.

Además, opinó que las resistencias provienen de quienes se beneficiaban del viejo régimen judicial. Según su interpretación, esos sectores no deseaban perder privilegios que, durante décadas, operaron sin contrapesos reales.

“Hay quienes quieren que todo siga igual, que el pueblo no tenga palabra. Pero eso ya cambió”, manifestó la jefe del Ejecutivo Federal.

Reprobó modelo impulsado por Zedillo en 1994

La presidente ofreció un repaso del proceso que rigió la designación de ministros desde la reforma judicial aprobada en el sexenio de Ernesto Zedillo. Señaló que dicho esquema impedía una auténtica participación democrática.

“¿Quién decidía antes? El Presidente enviaba su terna. Si el Senado no resolvía en dos ocasiones, el Presidente elegía directamente”, explicó. Aseguró que dicha norma se originó en el contexto de la reforma judicial de 1994.

Cuestionó que ese diseño institucional respondiera más a una lógica de control político que a una búsqueda de autonomía judicial. A su juicio, la sociedad mexicana ha exigido mayor transparencia y pluralidad en las decisiones públicas.

“En esa época no se escuchaba al pueblo; ahora sí. Esa es la gran diferencia entre el pasado y el presente”, declaró Sheinbaum.

La mandataria rechazó críticas por perfiles cuestionables

Pese a su defensa del proceso electoral judicial, Sheinbaum fue interrogada sobre los perfiles de algunos candidatos. Reporteros aludieron a señalamientos sobre presuntos vínculos con el crimen organizado.

En respuesta, la mandataria afirmó que esa clase de cuestionamientos deben canalizarse al Instituto Nacional Electoral (INE), organismo encargado de verificar la legalidad y transparencia del proceso.

“No somos autoridad electoral. Corresponde al INE revisar y, en su caso, actuar”, respondió. Insistió en que el nuevo modelo judicial representaba un avance y no debía desacreditarse con rumores infundados.

También pidió a la ciudadanía mantenerse informada y participar con responsabilidad en los comicios del próximo 1° de junio.

Llamó a defender la transformación en las urnas

En su mensaje final, Claudia Sheinbaum convocó a la población a acudir a las urnas para defender el rumbo de la transformación nacional. Subrayó que la elección de cargos judiciales marcará un antes y un después en la historia del país.

Reiteró que el actual proceso buscaba devolver al pueblo el poder de decisión en materias clave para la democracia. “No queremos que regrese el viejo régimen donde solo unos cuantos decidían por todos”, expresó.

Aseguró que los cambios impulsados desde 2018 han fortalecido la participación popular y han sentado las bases para una justicia más cercana al pueblo.

“El pueblo manda, y el pueblo va a decidir también sobre la justicia”, concluyó la presidente de México. –sn–