Lluvias no elevan niveles del sistema hídrico

Por Mireya Estrada | Corresponsal

Las lluvias de mayo no recuperaron las presas del Sistema Cutzamala. Continúa la tendencia a la baja. El almacenamiento total apenas superó el 48% de su capacidad, informaron autoridades federales del agua. Las precipitaciones fueron dispersas y débiles, insuficientes para revertir la sequía de meses anteriores. Las presas Villa Victoria, Valle de Bravo y El Bosque operaron en niveles críticos.

Alerta por baja captación

De acuerdo con el reporte del 27 de mayo, el volumen almacenado fue de 377.95 millones de metros cúbicos. La capacidad total del sistema asciende a 782.52 millones, lo que revela un déficit preocupante. En abril ya se había reportado una baja sostenida en el volumen, que empeoró en lo que va del año. Las lluvias más intensas en el mes no superaron los 20 milímetros, alertaron autoridades hidráulicas.

La presa Villa Victoria se ubicó en 64.59 Mm³, es decir, el 34.78% de su capacidad máxima. Valle de Bravo presentó un almacenamiento de 239.15 Mm³, equivalente al 60.64% del total. En tanto, El Bosque alcanzó los 74.20 Mm³, lo que representa el 36.66% de su capacidad. Todas las cifras se encontraron por debajo del promedio esperado para este periodo del año.

El bajo volumen almacenado amenaza con afectar el suministro de agua en la zona metropolitana. A pesar de las estrategias del gobierno federal, las lluvias no lograron fortalecer el sistema. La situación generó llamados urgentes por parte de especialistas en manejo de recursos hídricos. La infraestructura hidráulica enfrenta un estrés sin precedentes por la baja en los aportes pluviales.

Medidas aún insuficientes

Uno de los factores agravantes ha sido la baja eficiencia en captación de agua de lluvia. El programa implementado en la Ciudad de México avanzó lentamente en zonas vulnerables. Hasta el momento solo 47 mil viviendas recibieron sistemas de cosecha pluvial, informaron autoridades. Las alcaldías beneficiadas fueron Iztapalapa, Xochimilco y Tlalpan, donde la escasez es crítica.

A pesar de la promoción del programa, su cobertura sigue siendo limitada en relación con la demanda. Especialistas han advertido que los sistemas entregados no garantizan acceso pleno al recurso. El agua recolectada no cumple estándares para consumo humano, lo que limita su utilidad doméstica. El programa solo ayuda a suplir parte del servicio en hogares con desabasto regular, indicaron informes.

La situación del Sistema Cutzamala permanece como un foco rojo en el Valle de México. Autoridades reconocieron que las lluvias de mayo fueron irregulares y de bajo impacto. La combinación entre escasa precipitación y alta demanda presiona al sistema de distribución. Hasta ahora no se han anunciado medidas de emergencia adicionales frente al déficit creciente.

Organizaciones civiles urgieron al gobierno federal a fortalecer la captación pluvial con mayor inversión. Se propuso expandir el programa a más alcaldías y mejorar la calidad del agua recolectada. También se planteó la necesidad de campañas de educación hídrica para fomentar el ahorro. El problema, coincidieron especialistas, no se resolverá solo con lluvias esporádicas.

Riesgos para el abasto futuro

La sequía prolongada afectó los ecosistemas de la cuenca y redujo el nivel de los afluentes. Además, la contaminación de cuerpos de agua disminuyó aún más su capacidad de aprovechamiento. Expertos del Instituto de Ingeniería de la UNAM alertaron sobre un escenario de crisis prolongada. El reporte de la Conagua confirmó que mayo cerró como uno de los meses más secos de la década.

La situación obligó a considerar restricciones más severas en el suministro para zonas con alta demanda. En algunos puntos de la capital ya se implementaron tandeos y cortes temporales de agua. La presión sobre el sistema aumentará conforme avance la temporada de calor en el centro del país. Mientras tanto, continúan los esfuerzos para sensibilizar a la población sobre el uso racional del agua. –sn–