A 21 días de protestas de la CNTE, maestros bloquearon accesos del aeropuerto en Mérida. Ciudadanos inconformes rechazaron los actos que afectaron la movilidad y servicios básicos.

Óscar A. Pech | Corresponsal

Como parte de una jornada nacional, la CNTE instruyó a sus representantes en Yucatán a movilizarse. Los maestros se concentraron desde temprano para cerrar los accesos al Aeropuerto Internacional de Mérida. Las acciones se ejecutaron durante horas laborales, en arterias principales y caminos al recinto aéreo.

La movilización provocó inconformidad entre automovilistas, peatones y viajeros de distintas rutas. Los inconformes consideraron excesivas las acciones del magisterio, al paralizar vías estratégicas. La protesta interrumpió la circulación en una de las zonas más transitadas del sur de la ciudad.

El bloqueo fue parte de las medidas de presión acordadas desde la dirigencia nacional de la CNTE. Aunque la manifestación fue pacífica, tuvo consecuencias negativas para los usuarios del transporte público. Las avenidas colindantes quedaron colapsadas durante toda la jornada del lunes.

Aerolínea advierte contratiempos

La aerolínea Viva advirtió a sus pasajeros del bloqueo en la víspera de los hechos. Solicitó usar vías alternas ante el impacto de las protestas que comenzaron desde las 7 horas. A pesar del aviso, los accesos quedaron cerrados hasta las 16 horas, cuando inició el repliegue.

La circulación en avenidas colindantes siguió alterada, sin condiciones para el tránsito fluido. Pasajeros de vuelos nacionales e internacionales caminaron con maletas desde zonas aledañas. Algunos vuelos tuvieron ajustes de horario debido al arribo tardío de los usuarios.

Por parte de la autoridad se respetó el derecho a la libre expresión, aunque hubo perjuicio a terceros. Padres de familia y trabajadores reclamaron la afectación al libre tránsito y a las clases. La jornada de clases fue suspendida nuevamente en varios planteles públicos.

Suspenden transporte público

La Agencia de Transporte de Yucatán (ATY) reportó la suspensión de 13 rutas del sistema Vaivén. La interrupción afectó a estudiantes y trabajadores de zonas industriales y oficinas públicas. El tránsito colapsó en el sur de la ciudad, y la movilidad quedó a merced de improvisaciones.

Usuarios caminaron largos trayectos bajo el sol para llegar a sus destinos sin transporte disponible. No hubo personal de tránsito suficiente para desviar o canalizar el flujo vehicular. El caos vial se extendió desde la Ciudad Industrial hasta las inmediaciones del aeropuerto.

Unidades del transporte se quedaron varadas en calles alternas, sin posibilidad de continuar. Las afectaciones fueron mayores en horarios de entrada laboral y salida escolar. Autoridades estimaron que al menos 5 mil usuarios del transporte resultaron perjudicados.

Incidentes con transeúntes

Un motociclista discutió con manifestantes al intentar cruzar por un punto bloqueado. Elementos de la Guardia Nacional intervinieron para calmar los ánimos y evitar agresiones. El organismo mantuvo vigilancia permanente en el aeropuerto y sus inmediaciones federales.

Otros ciudadanos caminaron kilómetros, al no poder abordar taxis ni autobuses hacia la terminal. La fila de vehículos detenidos alcanzó varios kilómetros sobre la avenida Internacional. No se reportaron lesionados ni enfrentamientos directos con las fuerzas de seguridad.

La jornada transcurrió sin actos violentos, aunque con evidente tensión entre manifestantes y afectados. Viajeros que perdieron sus vuelos reclamaron ante los mostradores de las aerolíneas. Personal del aeropuerto brindó asistencia, pero no pudo evitar la afectación operativa.

Ruta de la protesta

La movilización inició en la planta de Bimbo, dentro de la Ciudad Industrial de Mérida. El contingente marchó por la avenida Internacional hasta llegar al acceso del aeropuerto. Durante el trayecto, lanzaron consignas, portaron pancartas y exigieron respuesta de autoridades.

La manifestación avanzó de forma ordenada, con presencia de líderes magisteriales locales. Tramos de la avenida quedaron cerrados por más de ocho horas sin alternativas viales funcionales. La ruta afectada es una de las principales arterias hacia el sur de la capital yucateca.

El gobierno estatal informó que mantiene el diálogo abierto con la representación de la CNTE. El conflicto forma parte de una serie de protestas simultáneas en distintas entidades del país. En Yucatán, la presión aumentó ante la cercanía del cierre del ciclo escolar.

Demandas del magisterio

Los docentes exigen jubilarse después de 28 años de servicio las mujeres y 30 los hombres. Reclaman desaparecer el régimen de pensión con Afores y retomar el sistema solidario. Piden eliminar la cotización bajo el modelo de UMAs, al que consideran injusto y regresivo.

También solicitaron mejoras en clínicas y hospitales del ISSSTE, así como su servicio médico. Exigen la eliminación de la Ley del ISSSTE, por considerarla contraria a sus derechos laborales. Argumentan que las condiciones actuales son precarias e insatisfactorias para su gremio.

El pliego petitorio fue entregado a autoridades federales y educativas sin respuesta concreta. Los líderes de la CNTE en Yucatán señalaron que las movilizaciones continuarán hasta ser atendidos. No descartaron nuevas acciones en zonas estratégicas de la ciudad.

Diálogo en curso sin avances

Aunque hay una mesa de diálogo con autoridades educativas, los bloqueos persisten en el estado. Los maestros se han rehusado a regresar a las aulas, pese al llamado de Joaquín Díaz Mena. El gobernador ha urgido a reanudar clases antes de los exámenes y el cierre escolar en julio.

Las autoridades educativas locales lamentaron el ausentismo y su impacto en los estudiantes. El conflicto ha dejado sin clases a miles de alumnos en escuelas de nivel básico y medio superior. Hasta el momento no se ha definido una ruta clara de solución o acuerdos.

Los maestros insisten en que el problema es nacional y que las respuestas deben ser federales. El gobierno federal ha reiterado su disposición al diálogo, sin aceptar los puntos exigidos. La tensión entre el magisterio disidente y las autoridades sigue sin resolverse. –sn–