Mala calidad de aire en sus oficinas son dolor de cabeza (49,2%), fatiga o cansancio (41,9%) y falta de concentración (27,4%)
Por Deyanira Vázquez | Reportera
Airzone ha realizado un estudio para conocer y evaluar la percepción sobre la calidad del aire en espacios interiores de los españoles. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los habitantes de las ciudades pasan entre el 80% y el 90% de su tiempo en espacios cerrados, siendo la calidad del aire en ellos un aspecto que preocupa al 74% de los españoles.
Esto pone de manifiesto la importancia del control y la gestión del aire en interiores y su impacto en el bienestar y la salud de las personas. De hecho, el 96% cree que la calidad del aire afecta directamente a la salud de las personas y un 81% afirma que pasaría más tiempo al aire libre si la calidad del aire fuera mejor.
Entre las consecuencias de respirar un aire de mala calidad en el interior, el dolor de cabeza (67,4%), la fatiga o cansancio (64,7%) y los mareos (48,5%) son los efectos que más señalan los españoles como resultado de los altos niveles de CO₂ que se respiran en espacios interiores.
En concreto, la Agencia Europea de Medio Ambiente recomienda mantener los niveles de CO₂ por debajo de 1.000 ppm para garantizar una buena calidad del aire y proteger la salud de los ocupantes. Asimismo, las partículas en suspensión, como el polvo, el polen o los virus, suponen un riesgo menos visible, pero igual de relevante, ya que pueden provocar afectar a la salud incluso sin síntomas inmediatos.
En estos casos, la ventilación no solo no ayuda, sino que puede agravar el problema. A pesar de todo ello, el 75% de los españoles indica que no sabe o tiene forma de conocer o medir si la calidad del aire en interiores es óptima. –sn–

