Aumenta apoyo hetero-aliado en escuelas y universidades

Por Tomás Enríquez | Corresponsal                                                       

Durante el marco del 28 de junio, “Día Internacional del Orgullo LGBT+”, estudiantes de preparatorias y universidades de Querétaro asistieron a talleres sobre diversidad sexual y no discriminación. Las actividades formaron parte de un esfuerzo conjunto entre organizaciones juveniles y dependencias del ámbito educativo y de salud. El objetivo fue fomentar espacios seguros para la juventud, sin homofobia ni transfobia.

Las jornadas educativas se llevaron a cabo en el Liceo Corregidora, el CBTIS 118, el CETIS 16, el Tecnológico Nacional de México campus Querétaro, y la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAQ. Participaron también docentes y autoridades escolares, quienes acompañaron las dinámicas de sensibilización. Las capacitaciones fueron impulsadas por SOS Discriminación Internacional Querétaro y el Observatorio Juvenil por la No Discriminación.

Ambas agrupaciones contaron con el respaldo de instituciones como la Secretaría de Seguridad del Municipio de Querétaro y la Secretaría de Salud estatal. También colaboró la Secretaría de Cultura mediante el centro cultural “La Casa del Faldón”. A lo largo de cinco años, estas entidades han promovido campañas para combatir el acoso escolar con un enfoque de derechos humanos.

Voces del estudiantado

El alumnado reconoció que las capacitaciones les permitieron identificar que el bullying no es una broma. Señalaron que este tipo de violencia atenta contra la dignidad de adolescentes y jóvenes en las aulas. También mencionaron que detrás de las agresiones existen prejuicios culturales vinculados a orientación sexual, identidad de género, clase social y discapacidad.

Estudiantes relataron que, ante una situación de hostigamiento, optaron por proteger a la víctima sin usar violencia. De manera colectiva, decidieron acompañarle lejos de la persona agresora y notificar el hecho a las autoridades escolares. Afirmaron que su intención fue frenar el acoso y evitar su repetición, sin normalizar las actitudes discriminatorias.

También subrayaron que, gracias a las capacitaciones, adquirieron herramientas para identificar formas sutiles de exclusión en el entorno escolar. Aseguraron que la prevención comienza desde el respeto cotidiano y la empatía hacia la diversidad. Algunos participantes expresaron su voluntad de convertirse en agentes de cambio dentro de sus comunidades educativas.

El papel del aliado LGBT+

Integrantes del Observatorio Juvenil y de SOS Discriminación Internacional Querétaro explicaron el concepto de aliado LGBT+, con base en la definición de la organización Lambda Legal. Se trata de personas no pertenecientes a la comunidad LGBT+, pero comprometidas con la igualdad. Su acción implica acompañar, denunciar injusticias y promover el respeto.

Indicaron que un aliado puede ser un compañero heterosexual que apoya a su amigo LGBT+ cuando enfrenta discriminación. También puede ser un padre, madre o docente que fomente entornos inclusivos dentro y fuera de la escuela. El rol de aliade implica conciencia social y valentía para no ser indiferente ante las violencias.

Advirtieron que quienes asumen este compromiso pueden ser blanco de burlas, intimidación o rechazo. Por eso, resaltaron la importancia de construir redes de apoyo entre estudiantes, docentes y familias. El trabajo colectivo —explicaron— permite erradicar la homofobia, la transfobia y toda forma de violencia desde las aulas.

Escuelas libres de discriminación

Las juventudes aliadas aseguraron que el cambio cultural comienza desde la educación y la denuncia. Afirmaron que el respeto a la diversidad no debe ser una excepción, sino una norma cotidiana. También invitaron a más estudiantes a sumarse como aliades activos en sus planteles.

Las organizaciones juveniles concluyeron que el esfuerzo debe extenderse a todos los espacios de la vida social. Consideraron esencial mantener las alianzas entre instituciones educativas, autoridades de salud y áreas culturales. Expresaron que la continuidad de estos talleres fortalece el tejido social en Querétaro.

Añadieron que la lucha contra la discriminación no solo corresponde a quienes la padecen. Involucra también a quienes eligen no callar ante la injusticia y actúan en favor de la dignidad. “Todos podemos hacer la diferencia”, expresaron. –sn–

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