Nuevo plan sanitario enfoca medicina preventiva. Todos los recién nacidos serán sometidos a exámenes de ADN a partir de 2025.
SN Redacción | Agencias
La Secretaría de Salud del Reino Unido anunció un plan sanitario que modificó el funcionamiento del Servicio Nacional de Salud (NHS). El proyecto estableció la realización de pruebas genéticas a todos los recién nacidos para detectar cientos de enfermedades desde sus primeros días de vida.
La estrategia forma parte de una transformación hacia la medicina preventiva. Esta iniciativa se desplegará a lo largo de una década y contempla el uso intensivo de tecnologías genómicas para mejorar el diagnóstico médico y anticiparse a síntomas de alto riesgo.
El secretario de Salud, Wes Streeting, explicó que el país pretende convertir el modelo sanitario de reacción en uno de predicción y prevención. Afirmó que el NHS será capaz de adaptarse al futuro y reducir la carga sobre hospitales mediante la detección temprana de enfermedades.
Proyecto con visión genómica
El plan destinará 650 millones de libras a investigación en genética. Con esta inversión, se implementará el análisis de ADN como herramienta central para personalizar la atención médica, permitir tratamientos individualizados y mejorar el pronóstico de enfermedades hereditarias.
Streeting confirmó que los detalles operativos se incluirán en el nuevo Plan del Sector de Ciencia de la Vida, el cual será presentado a principios de julio. El documento precisará cómo se desplegará la estrategia en hospitales, clínicas y unidades de diagnóstico genético.
Junto a las pruebas genéticas, se incorporarán tecnologías complementarias como inteligencia artificial. Estas herramientas permitirán analizar grandes volúmenes de información médica para identificar patrones de riesgo y facilitar intervenciones clínicas más efectivas.
Inteligencia artificial en salud
Según el secretario, los datos procesados ayudarán a ofrecer tratamientos más precisos, a reducir la presión sobre servicios hospitalarios y a extender la expectativa de vida. Aseguró que la medicina preventiva se convertirá en un eje rector del nuevo sistema.
La estrategia también incluirá reformas estructurales. Parte de los servicios serán trasladados desde hospitales hacia las comunidades, lo que pretende crear un modelo de atención más accesible y cercano a los pacientes, especialmente en zonas rurales o marginadas.
A ello se suma un proceso de digitalización. El NHS sustituirá procedimientos analógicos con tecnologías digitales para acelerar diagnósticos, reducir tiempos de espera y aumentar la eficiencia administrativa en centros de atención médica.
Incremento presupuestal histórico
Ante las crecientes demandas sanitarias, el plan se presentó como respuesta a las listas de espera que afectaron a millones de pacientes. La ministra de Hacienda, Rachel Reeves, anunció un aumento de 29 mil millones de libras anuales al presupuesto del NHS durante los próximos tres años.
Esta inversión se vincula con promesas electorales del actual gobierno británico, que comprometió una modernización del sistema sanitario. También refleja una tendencia internacional que valora la genómica como herramienta clave para la salud pública.
Reino Unido se convirtió en el primer país en aplicar pruebas genéticas a nivel nacional desde el nacimiento. La medida implica una cobertura universal con implicaciones profundas en términos de atención clínica, prevención y uso de datos personales.
Debate sobre privacidad genética
Expertos en bioética y derechos digitales advirtieron sobre el uso indebido de información genómica. Cuestionaron si el sistema podrá garantizar la confidencialidad de los resultados y evitar posibles formas de discriminación genética en seguros o empleo.
Las autoridades aseguraron que el programa incluirá marcos normativos sólidos. Los datos serán almacenados en servidores cifrados, con acceso limitado a personal médico autorizado, y no podrán ser utilizados con fines comerciales ni judiciales.
El plan prevé que los padres puedan oponerse a la realización de la prueba mediante objeción por escrito. Sin embargo, el gobierno espera una alta aceptación, dado que se trata de una medida sin efectos invasivos y con alto valor médico.
Hacia un nuevo paradigma médico
Con esta estrategia, el Reino Unido buscará posicionar a su sistema sanitario como referente mundial en medicina personalizada. El uso temprano de pruebas genéticas permitirá reducir el impacto de enfermedades raras, cardiovasculares y neurodegenerativas.
El NHS será el encargado de aplicar las pruebas, coordinar laboratorios, interpretar resultados y ofrecer consejería genética. En paralelo, se desarrollarán protocolos clínicos para guiar la intervención médica conforme al perfil de cada paciente.
El plan también implicará capacitación de médicos, técnicos y genetistas. Para ello, se establecerán alianzas con universidades, centros de investigación y organismos internacionales especializados en salud pública y biotecnología. –sn–


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