En este sentido, Serenae, especializada en este tipo de soluciones, puede trabajar con promotores y ayuntamientos para garantizar que los eventos puedan desarrollarse con normalidad.
Por Deyanira Vázquez | Reportera
Cada vez es más habitual ver como pueblos pequeños, espacios naturales o incluso playas se convierten durante el verano en escenario de grandes eventos culturales, conciertos, fiestas populares o festivales de música. Pero lo que no se ve en los carteles es uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan los organizadores: la falta de conexión a Internet.
La mayoría de estos eventos se celebran en lugares donde no hay fibra óptica ni cobertura móvil suficiente. Sin embargo, hoy la conectividad es esencial para que el evento pueda desarrollarse con normalidad: se necesita para vender entradas, operar con terminales de pago, coordinar equipos de seguridad o facilitar el trabajo de los medios de comunicación.
"Mucha gente da por hecho que habrá conexión, pero en estos entornos no es tan evidente. Sin red, no se pueden activar los accesos, coordinar los equipos ni emitir señal a medios. La conectividad es ya una parte estructural del evento", señala Rodrigo Ladrón De Guevara, CEO de Serenae.
Según el último Informe de Cobertura de Banda Ancha del Gobierno, publicado en 2024, aún existen en España más de 2.600 zonas donde no se puede garantizar una velocidad mínima de conexión de 100 Mbps. Aunque la cobertura ha mejorado en los últimos años, sigue habiendo una brecha entre las ciudades y las zonas rurales o costeras. –sn–

