México obtuvo una medalla de plata y dos de bronce en judo durante los Juegos Panamericanos Junior ASU2025. Jornada de arranque con podios.
Por Eric Gómez | Reportero
La jornada inaugural del torneo de judo en los Juegos Panamericanos Junior ASU2025 concluyó con tres preseas para México. El equipo sumó una medalla de plata y dos de bronce en distintas categorías. Los combates se realizaron en un ambiente de alta competitividad y tensión en el tatami.
La capitalina Aylin Ávila obtuvo la medalla de plata en la categoría de los 52 kilogramos. En la final, enfrentó a la brasileña Rafaela Rodrigues, quien logró imponerse tras un intenso duelo. Ninguna de las competidoras logró puntuar durante los cuatro minutos reglamentarios.
Ávila acumuló dos amonestaciones en el tiempo regular: una por falso ataque y otra por falta de combate. Esto la llevó al punto de oro, donde cometió una tercera amonestación. La infracción por falta de combate derivó en su descalificación.
La brasileña Rodrigues se quedó con el oro, mientras que la venezolana Leomaris Ruiz y la peruana Driulys Rivas compartieron el bronce. La actuación de Ávila representó el primer podio para México en el torneo de judo.
Bronce para Eduardo Sagastegui
En la rama varonil, el tamaulipeco Eduardo Sagastegui conquistó el bronce en la categoría de 60 kilogramos. Derrotó al argentino Galo Villavicencio en el combate decisivo por la medalla. La victoria le permitió subir al podio junto al brasileño Lucas Takaki.
El oro fue para el ecuatoriano Jonathan Banavides, quien superó al estadounidense Christopher Velazco en la final. Sagastegui mostró dominio técnico y precisión en su combate por la presea. Su triunfo otorgó a México la segunda medalla en el arranque de la competencia.
La presencia mexicana en el podio reforzó la representación nacional en un torneo con alto nivel continental. Las delegaciones mostraron fuerza y estrategia en cada encuentro. El público acompañó con entusiasmo el desarrollo de los combates.
Con estas dos preseas, México se colocó entre los países que iniciaron con buen paso en el medallero. La actuación de sus judocas auguró un cierre competitivo en los días restantes. El torneo continuará con más categorías y combates decisivos.
Intento fallido de Frida Maya
En la división de 57 kilogramos, Frida Maya intentó sumar una tercera presea en la jornada. Enfrentó a la canadiense Carla Van Zyl en el combate por el bronce. El duelo resultó favorable para la representante de Canadá.
Maya quedó fuera del podio, pero dejó una actuación destacada por su entrega en cada combate. Su participación cerró la presencia mexicana en la jornada inaugural. La delegación planeó ajustes tácticos para las próximas competencias.
La prueba de los 57 kilogramos coronó a las mejores exponentes de la categoría. El nivel mostrado confirmó la exigencia del evento y la preparación de las competidoras. Los resultados de esta división contribuyeron a definir el cuadro de medallas.
El tatami central fue testigo de combates definidos por detalles técnicos y resistencia física. Cada punto se disputó con intensidad en los encuentros finales. Los jueces aplicaron de forma estricta las reglas para garantizar la equidad.
Resumen de podios por categoría
En la categoría femenina de 52 kilogramos, el oro fue para Rafaela Rodrigues de Brasil. La plata correspondió a Aylin Ávila de México. El bronce lo compartieron Leomaris Ruiz de Venezuela y Driulys Rivas de Perú.
En la división masculina de 60 kilogramos, el primer lugar fue para Jonathan Banavides de Ecuador. El segundo puesto lo ocupó Christopher Velazco de Estados Unidos. Los terceros lugares correspondieron a Eduardo Sagastegui de México y Lucas Takaki de Brasil.
Los resultados colocaron a México en una posición relevante en el medallero inicial. La delegación confió en mantener el ritmo competitivo en las jornadas siguientes. La expectativa se centró en sumar más preseas en otras divisiones.
La arena de competencia reunió a delegaciones de todo el continente. Los representantes nacionales recibieron apoyo constante de compañeros y entrenadores. El evento confirmó el nivel creciente del judo juvenil en la región.
Expectativas para las próximas jornadas
La agenda del torneo contempló nuevas rondas eliminatorias y finales en diversas categorías. México buscó aprovechar la experiencia del primer día para mejorar su desempeño. La estrategia combinó ajustes técnicos y preparación física intensiva.
Los rivales demostraron que el margen de error es mínimo en este nivel. Cada combate exige concentración y disciplina táctica. Los entrenadores enfatizaron la importancia de la defensa y el ataque oportuno.
La delegación mexicana mantuvo el objetivo de ampliar su cosecha de medallas. El trabajo en equipo y la motivación interna jugaron un papel clave. Las siguientes jornadas podrían definir la posición final en el medallero.
El público y los medios siguieron con atención el desempeño de cada judoca. La cobertura internacional resaltó el nivel del torneo juvenil continental. El cierre de la competencia está programado para finales de esta semana. –sn–


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