Según un estudio de mercado realizado por TENA, líder en productos para incontinencia, el 54% de sus usuarios tienen entre 36 y 55 años
Por Deyanira Vázquez | Reportera
Reírse con amigos, bailar en el concierto o salir a correr por las mañanas. En cualquiera de estas situaciones se podría haber experimentado pérdidas de orina, a pesar de la creencia de que la incontinencia urinaria solo afecta a adultos mayores. Según un estudio de mercado realizado por TENA, líder en productos para incontinencia, el 54% de sus usuarios tienen entre 36 y 55 años.
La incontinencia es la pérdida involuntaria de orina y se estima que 400 millones en el mundo la padecen. Si se juntara a las 10 ciudades más pobladas del planeta, no se alcanzaría esa cifra. Aun así, sigue siendo una condición que se vive en silencio. De acuerdo con los Manuales MSD, existen cuatro tipos: por urgencia (deseo incontrolable de orinar), de esfuerzo (al toser, reír o saltar), por rebosamiento (cuando la vejiga no se vacía por completo) y secundaria a otra enfermedad. Muchas personas presentan una combinación de ellas.
Las causas son diversas: debilitamiento del suelo pélvico, estrés, partos recientes, secuelas de cirugías de próstata o incluso ejercicio de alto impacto. Incluso unas gotas se consideran incontinencia y son motivo para acudir al médico.
Tania Arroyo, usuaria de TENA, compartió en el podcast Con TENA® sigo siendo yo…: "Me di cuenta de que tenía pequeñas pérdidas, especialmente al estornudar. Consulté a mi doctor y me recomendó ejercicios de piso pélvico. Esto empezó justo después de cumplir 30 años. –sn–

