Allianz Partners señala la importancia de conocer el marco legal que ampara cada compra que realizamos para la vuelta a las aulas, tanto en establecimientos físicos como online, así como los derechos del cliente sobre los productos
Por Deyanira Vázquez | Reportera
Las familias españolas gastarán más de 500 euros por niño en la vuelta al cole, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). En los últimos tres años, este gasto se ha incrementado un 18%. Dentro de este presupuesto se incluyen los libros de texto, que suponen la mayor parte del presupuesto con 365 euros, seguidos del material de papelería, el calzado deportivo, el chándal y la mochila.
Las asociaciones de consumidores y usuarios recomiendan reutilizar lo máximo posible el material del año anterior, recurrir a las compras de segunda mano, planificar los gastos con antelación, no dejarse llevar por las marcas ni por las ofertas que implican adquirir más material de la cuenta, y comparar los precios de los productos en distintos establecimientos físicos, pero también en la compra online.
Desde Allianz Partners recuerdan la importancia de conocer el marco legal que ampara cada compra que realizamos, así como los derechos de los clientes sobre los productos. Esto es especialmente relevante en periodos de compras masivas como el de la vuelta al cole. La compañía líder en Seguros y Asistencia distingue entre recomendaciones en los establecimientos físicos y en el comercio online.
Enel caso de los establecimientos físicos, es fundamental verificar el plazo de devolución en cada comercio, ya que la devolución sin causa no es obligatoria y obedece a las políticas de cada local, así como comprobar que, si la devolución sin causa es por medio de un vale, se debe saber que no puede tener fecha de caducidad.
La jurisprudencia determina que, si el dinero no caduca y un vale es una forma de dinero, tampoco puede caducar. Además, siempre se tiene que conservar el ticket de compra, ya que este será el documento que permite reclamar la garantía del producto, y comprobar que los establecimientos en los que se compra tengan hojas de reclamaciones a disposición de los consumidores. –sn–

