Premios INEHRM 2025 reconocieron investigaciones históricas y académicas destacadas. Reconocimiento a la investigación.
Por Adriana López | Reportera
La Secretaría de Cultura del gobierno federal, a través del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), entregó los Premios INEHRM 2025, evidenciando la vitalidad de la investigación histórica en el país y el compromiso institucional con especialistas. En la ceremonia, el director general del Instituto, Felipe Ávila Espinosa, señaló que el deber institucional era dar voz a mujeres, pueblos originarios, afrodescendientes, trabajadores, estudiantes y comunidades diversas. Asimismo, enfatizó la responsabilidad del quehacer historiográfico frente a un país en constante transformación.
La entrega representó un acto de reconocimiento al esfuerzo académico y un incentivo para continuar el estudio riguroso de la historia mexicana. La ceremonia reunió a investigadores, académicos y representantes institucionales para reafirmar la importancia de la memoria histórica en la sociedad. Además, se resaltó el papel de la investigación como herramienta de libertad y responsabilidad social.
Los Premios INEHRM 2025 coincidieron con la misión del Instituto de estimular el conocimiento del pasado y fortalecer la comprensión de los procesos que definieron a México. Cada galardón fue asignado por el Consejo Técnico Consultivo, encabezado por Felipe Ávila Espinosa, y acompañado de Romana Falcón Vega, Consuelo Sánchez Rodríguez, Margarita Vázquez Montaño y Nidia Castorena Sáenz. Los integrantes del Consejo fueron reconocidos por su rigor y dedicación en la deliberación de los premios.
Premios y ganadores
El Premio Clementina Díaz y de Ovando fue otorgado a Lizeth Gabriela Rivera Reinaldo, quien dedicó el reconocimiento a colegas y a 31 años de labor docente. Expresó que la historia sociocultural de las mujeres seguía abriendo caminos para comprender un país en proceso de autoexploración. La ganadora destacó la importancia de la docencia en la transmisión de conocimiento histórico.
El Premio Daniel Cosío Villegas fue para Josefina McGregor Garate, quien recordó la evolución del INEHRM desde su fundación en 1953 y subrayó la necesidad de sostener su independencia intelectual. La Dra. Faustina Estela Candelas y Reta recibió Mención Honorífica y enfatizó que las instituciones del Estado permitieron que la investigación histórica tuviera impacto social real. Ambos reconocimientos evidenciaron la relevancia de la historiografía crítica en México.
El Premio José C. Baladés reconoció a Alberto Donaldo Enríquez Peña y a David Eduardo Vázquez Sánchez, quienes resaltaron la importancia de los archivos como territorios de libertad y de la memoria colectiva. Enríquez Peña rindió homenaje al historiador que da nombre al premio, mientras Vázquez Sánchez señaló que cada archivo salvado representa una victoria histórica. Los galardonados enfatizaron el valor del rescate documental en la construcción de identidad nacional.
Investigaciones innovadoras
El Premio Josefina Zoraida Vázquez fue entregado a Alicia Civera Cerecedo y Carlos Escalante Hernández, quienes impulsaron la historiografía educativa en zonas periféricas. Civera señaló que la escuela funcionó como espejo de desigualdades y ventana para transformarlas. Sus trabajos destacaron la relación entre educación y equidad social.
El Premio Berta Ulloa fue otorgado a Gloria Maritza Gómez Revuelta por su investigación sobre diplomacia y ciencia espacial en México. Las menciones honoríficas recayeron en Erik del Ángel Landeros y Jimena Palacios Uribe por sus estudios sobre política exterior e instrumentos musicales del siglo XIX. Los trabajos reconocidos evidenciaron la diversidad temática y metodológica de la investigación histórica contemporánea.
El Premio Ernesto de la Torre Villar fue entregado a Fernando Martín Jiménez Sánchez y Rubens Vanderland Oliveira Santos por análisis rigurosos del siglo XIX. Las menciones honoríficas fueron para Andrea Martínez Coronel y Gonzalo Lacsani Segura. Cada investigación resaltó la importancia del método crítico y la documentación confiable en la historiografía mexicana.
Trayectorias y aportaciones
El Premio Gastón García Cantú reconoció a Juan Pablo Sarmiento Valle y Raúl Flores Ruiz, quienes exploraron territorialidades rurales y subrayaron la relación entre territorio e historia. Flores Ruiz destacó que comprender los espacios rurales es clave para entender procesos históricos complejos. Las investigaciones reflejaron la dimensión regional y social de la historia mexicana.
Los Premios Salvador Azuela fueron otorgados a Denise Alisa Palomino Ligas y Francisco Joel Guzmán Anguiano por estudios sobre industria textil, antifascismo y cultura editorial. Los trabajos evidenciaron la intersección entre economía, política y cultura en diferentes épocas. Cada investigación contribuyó a profundizar la memoria histórica y la comprensión de fenómenos socioculturales.
La ceremonia contó con la asistencia de Raimundo César Martínez García, presidente del Colegio Mexiquense A.C.; Javier Garcíadiego Dantán, director de la Academia Mexicana de la Historia; José Alfonso Suárez del Real, asesor de la Presidencia de la República; Olivia Salomón Vivaldo, directora general de la Lotería Nacional; y Mariana Gómez Godoy, directora general de la Conservaduría del Palacio Nacional. Las autoridades subrayaron la relevancia de los premios para consolidar la investigación histórica nacional. La presencia de representantes institucionales reforzó la legitimidad del reconocimiento académico. –sn–
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