La inflación, los impuestos y el alza en servicios complican el panorama

Por Deyanira Vázquez | Reportera

El 2025 inicia con una perspectiva económica adversa para millones de mexicanos. La inflación cerró el 2024 en 4.44%, superando el objetivo de 3% del Banco de México, mientras que la inflación alimentaria alcanzó casi el 8%. Estos índices evidencian el impacto acumulado de más de 30% en los precios de productos esenciales durante la era pospandemia, según datos de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).

El presidente de la ANPEC, Cuauhtémoc Rivera, señaló que la tradicional «cuesta de enero» se agravó desde diciembre con incrementos en productos básicos como leche, tortilla, refrescos y cigarros. Además, el aumento del 4.5% al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) encareció los hidrocarburos, lo que afecta directamente los costos de transporte y logística, impulsando aún más los precios.

Servicios esenciales como agua, energía eléctrica, gas e internet también registraron incrementos, al igual que impuestos estatales como el predial y la tenencia vehicular. Dependencias gubernamentales anunciaron ajustes en derechos de documentos personales, como licencias de conducir y actas de registro civil, lo que representa una carga adicional para los hogares.

Servicios básicos e impuestos al alza

El transporte público tampoco escapó de los aumentos, afectando directamente a las clases trabajadoras. Según Rivera, estas condiciones anulan el impacto positivo del incremento al salario mínimo y dificultan que programas como el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC) logren moderar el alza en los precios de alimentos.

Rivera advirtió que el panorama económico y social se mantendrá complejo en los próximos meses. Problemas como el posible cierre de la frontera a los migrantes y las deportaciones masivas desde Estados Unidos amenazan las remesas, uno de los pilares de la economía nacional.

Por otro lado, el futuro del T-MEC enfrenta incertidumbres debido a desacuerdos en temas clave como la importación de granos, especialmente el maíz. Este conflicto podría repercutir en sectores como la industria automotriz, que ya enfrenta desafíos por la competencia con vehículos chinos.

La violencia y el cambio climático

El incremento de la violencia, derivado de la guerra contra el narcotráfico, sigue afectando sectores como el turismo y el comercio. Rivera advirtió que prácticas como la extorsión y el cobro de derecho de piso continúan minando la economía local.

Además, la falta de preparación ante desastres naturales derivados del cambio climático se perfila como otro gran reto. Rivera recordó el caso de Acapulco y urgió a implementar medidas preventivas para evitar situaciones similares en el futuro.

Decisiones legislativas controvertidas

El presidente de la ANPEC criticó la postura de algunos legisladores que buscan prohibir ciertos productos sin analizar las consecuencias. Estas políticas, señaló, fortalecen la informalidad y el mercado ilícito, otorgando oportunidades a grupos delictivos en detrimento del comercio regulado.

Rivera concluyó que el entorno de incertidumbre requiere una estrategia preventiva por parte de los ciudadanos y las autoridades. «Es necesario tomar nota de estos riesgos potenciales y prepararnos para enfrentar una zona de turbulencia económica y social», puntualizó. –sn–