Ataque directo en Barra de la Cruz

Por José Víctor Rodríguez | Reportero

El defensor ambientalista Cristino Castro Perea fue asesinado en la comunidad de Barra de la Cruz, municipio de Santiago Astata, Oaxaca. El activista se encontraba en el quiosco de la localidad cuando dos sujetos en motocicleta le dispararon en repetidas ocasiones.

Testigos informaron que los agresores huyeron del lugar sin ser detenidos. Castro Perea, de 63 años, había denunciado en varias ocasiones amenazas derivadas de su lucha por la protección del territorio.

La noticia de su asesinato fue confirmada por el Centro de Derechos Humanos y Asesorías a Pueblos Indígenas (Cedhapi). La organización recordó que desde 2023 el activista formaba parte del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas.

A pesar de estar bajo este esquema, Castro Perea fue asesinado sin que se le garantizara seguridad. El ataque generó indignación entre colectivos ambientalistas, quienes exigieron justicia inmediata.

Conflictos territoriales y amenazas previas

El Cedhapi informó que en 2013 un grupo intentó apoderarse de terrenos a la orilla de la playa en Barra de la Cruz. Se trataba de una extensión de 24 hectáreas que presuntamente serían lotificadas y vendidas a empresarios hoteleros.

El activista había denunciado estos intentos de despojo en diversas instancias. También se opuso a la destrucción de manglares en la zona conocida como «El Nanche». En febrero de 2022, sujetos ajenos a la comunidad llegaron con maquinaria pesada para devastar el ecosistema.

En marzo de 2021, en asamblea comunitaria, se acordó respetar el territorio de Barra de la Cruz. Sin embargo, los intentos de apropiación continuaron con respaldo de grupos de poder político y económico.

Protección federal insuficiente

El 29 de diciembre de 2023, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró santuario natural a la playa de Barra de la Cruz. La medida buscaba frenar la especulación inmobiliaria y proteger el ecosistema de la zona.

A pesar de esta declaratoria, el Cedhapi denunció que persisten las amenazas contra defensores del territorio. La organización exigió que ninguna fuerza política interfiera en la lucha de las comunidades indígenas por sus tierras.

El asesinato de Castro Perea se suma a una serie de agresiones contra activistas en Oaxaca. Organizaciones sociales denunciaron que el Mecanismo de Protección no ha sido efectivo en su labor.

Exigen investigación y sanciones

El presidente del Cedhapi, Maurilio Santiago Reyes, solicitó la apertura de una carpeta de investigación para esclarecer el crimen. Exigió sanciones para los responsables materiales e intelectuales del homicidio.

Asimismo, llamó al gobierno estatal y federal a garantizar la seguridad de los defensores ambientalistas de Barra de la Cruz. Alertó que la zona sigue siendo disputada por intereses ajenos a las comunidades originarias.

El asesinato del activista generó una ola de indignación en redes sociales. Diversos colectivos se pronunciaron exigiendo medidas urgentes para frenar la violencia contra quienes defienden el medio ambiente. –sn–