Al brindar finanzas inclusivas al sector femenino las acerca a las herramientas necesarias para tomar decisiones informadas sobre su educación y carrera.
Por Deyanira Vázquez | Reportera
En la actualidad, las mujeres siguen estando subrepresentadas en las áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). A pesar de los avances significativos en los últimos años, las barreras económicas, educativas y sociales siguen limitando el acceso de las mujeres a carreras en estos campos. Una de las principales herramientas para superar estas barreras es la inclusión financiera.
La educación financiera, en particular, se ha convertido en un factor clave para que más mujeres puedan ingresar y prosperar en los sectores de STEM. La inclusión financiera no solo se trata de acceso a servicios bancarios o microcréditos, sino de brindar a las mujeres las herramientas necesarias para tomar decisiones informadas sobre su educación y carrera, lo que, a su vez, impacta directamente en su desarrollo profesional en estos campos.
Uno de los mayores obstáculos que enfrentan las mujeres para avanzar en sus estudios y carreras en STEM es la falta de recursos económicos. Sin una adecuada educación financiera, los jóvenes pueden no ser conscientes de las oportunidades de financiamiento, becas o créditos que existen para apoyarlas en su formación académica y profesional. Aquí es donde la inclusión financiera desempeña un papel fundamental.
La educación financiera les permite entender cómo administrar sus finanzas, cómo invertir en su desarrollo profesional y cómo acceder a recursos económicos que les ayudarán a superar las barreras económicas. Programas como los de Laudex ( https://laudex.mx/ ), que apoyan a estudiantes y profesionales jóvenes con herramientas y recursos financieros, son cruciales para garantizar que las mujeres puedan acceder a oportunidades educativas y laborales en el ámbito de las ciencias y la tecnología.
A pesar del creciente interés en áreas STEM, las cifras revelan que las mujeres en México siguen enfrentando obstáculos significativos. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), sólo el 27% de los estudiantes en programas de ingeniería y ciencias aplicadas en México son mujeres. Esta cifra refleja una subrepresentación notable, dado que el sector femenino constituye aproximadamente el 50% de la población estudiantil en general.
Además, el Foro Económico Mundial señala que las mujeres en México tienen menos acceso a posiciones de liderazgo dentro de áreas STEM, con solo el 19% de las mujeres que ocupan cargos de liderazgo en ciencia y tecnología en comparación con un 35% a nivel mundial. Esta disparidad resalta la necesidad urgente de políticas públicas y programas educativos que fomenten la inclusión y el empoderamiento del sector femenino en estos campos.
Estas estadísticas muestran que, a pesar de los avances, las mujeres en México siguen enfrentando barreras que limitan su participación en sectores de alta demanda como la ciencia y la tecnología. Por ello, es crucial seguir impulsando iniciativas que promuevan la igualdad de género en STEM y permitan que más féminas accedan a estas áreas. –sn–

