La marca de café propone una solución con #Veciencuentro, una iniciativa que promueve el cambio a través de encuentros y experiencias inmersivas.
Por Deyanira Vázquez | Reportera
"Vivimos pegados unos a otros, pero cada vez más aislados". En un mundo donde la vida en comunidad parece reducirse a grupos de WhatsApp y saludos tímidos en el ascensor, los españoles están perdiendo el vínculo con sus vecinos. Así lo demuestra el estudio sobre relaciones vecinales realizado por Marcilla, cuyos datos reflejan una preocupante desconexión: el 56% de los españoles no conoce el nombre de sus vecinos y el 76% nunca ha quedado con ellos .
Una sociedad interconectada, pero cada vez más alejada del sentido de comunidad.
España siempre ha sido reconocida por su espíritu sociable, sus calles llenas de vida y la calidez de sus relaciones interpersonales. Sin embargo, la realidad actual pinta un cuadro distinto: la urbanización, el ritmo acelerado de vida y la digitalización han reducido la interacción cara a cara, incluso con las personas que se tienen más cerca.
Los datos revelan que el sentido de la comunidad se ha ido perdiendo con el paso de las generaciones. Hace unos años era común que los vecinos tuvieran relaciones estrechas, pero, hoy en día, la realidad es muy distinta. Según el estudio ‘¿Cómo nos llevamos con nuestros vecinos?’, realizado por Marcilla, el 56% de los españoles, no conoce el nombre de sus vecinos. Esta desconexión vecinal se hace aún más evidente en la falta de interacción cotidiana: el 47% de los encuestados nunca ha hablado más de dos minutos con un vecino y que apenas el 7% confía en tener una relación de confianza con ellos.
La falta de interacción no solo afecta a las relaciones personales, sino que también debilita el tejido social y el apoyo mutuo que antes caracterizaba a las comunidades vecinas. Esto se refleja en que solo un 35% rara vez o nunca ha hecho un favor a un vecino, mientras que solo el 4% de los españoles comparte aficiones con ellos.
A pesar de esta desconexión, el estudio de Marcilla también deja entrever una luz de esperanza : el 71% de los españoles declara que le gustaría conocer mejor a sus vecinos , y el 86% asegura que no tendría problema en hacerles un favor si se lo pidieran . Esto sugiere que el problema no es la falta de voluntad, sino la falta de oportunidades y de contextos adecuados para fomentar estos encuentros.
Pero lo más llamativo es que el 70% nunca ha compartido algo tan sencillo como un café con quienes viven puerta con puerta. –sn–

