Jóvenes enfrentan automatización laboral masiva.Millones de empleos desaparecen; Generación Z, la más vulnerable ante la IA.

Por Gabriela Díaz | Reportera                                                       

El avance acelerado de la inteligencia artificial transformó el panorama del empleo global. Expertos advirtieron que millones de trabajos corrieron riesgo, principalmente aquellos ocupados por jóvenes que apenas ingresaron al mercado laboral en los últimos años.

La Generación Z, conformada por personas nacidas entre mediados de los noventa y principios de los 2010, enfrentó uno de los entornos laborales más inciertos de las últimas décadas. Muchos sectores que ofrecían estabilidad fueron absorbidos por herramientas automatizadas.

Profesiones consideradas seguras hasta hace poco, como programación, atención al cliente o asistencia administrativa, comenzaron a reducir su plantilla humana a favor de sistemas inteligentes. La adaptación tecnológica se convirtió en una exigencia inmediata.

Programación en riesgo

La programación fue uno de los primeros sectores en sufrir los efectos de la automatización. Herramientas como GitHub Copilot, Codex de OpenAI y Gemini Code Assist de Google demostraron la capacidad de escribir, depurar y mejorar código con rapidez.

Compañías como Meta, Microsoft y Google anunciaron que al menos la mitad de su código sería generado por inteligencia artificial en los próximos dos años. Esta medida desplazó a desarrolladores jóvenes sin experiencia profesional sólida.

El mercado privilegió a perfiles senior capaces de colaborar con sistemas inteligentes, dejando atrás a quienes no contaban con conocimientos avanzados o habilidades técnicas complementarias. La brecha laboral intergeneracional se amplió en el sector.

Legal y administrativo automatizado

La inteligencia artificial también afectó el ámbito legal y administrativo. Tareas como redacción de documentos, análisis de contratos y búsqueda de jurisprudencia fueron asumidas por programas entrenados con millones de datos normativos.

Los abogados jóvenes enfrentaron un panorama limitado. Firmas jurídicas comenzaron a delegar funciones rutinarias en sistemas automatizados, restando oportunidades a quienes buscaban iniciarse profesionalmente tras egresar de universidades.

Lo mismo ocurrió en trabajos administrativos. Procesamiento de facturas, organización de bases de datos, gestión documental y atención a empleados fueron automatizados en muchas empresas, lo que desplazó a jóvenes sin experiencia consolidada.

Atención al cliente sustituida

Los servicios de atención al cliente, antes fuente común de empleo juvenil, fueron reemplazados por chatbots y asistentes virtuales. Estos sistemas gestionaron dudas frecuentes, trámites y consultas sin necesidad de intervención humana.

Cadenas comerciales, supermercados, bancos y cines implementaron quioscos de autopago y soporte digital, reduciendo la contratación de personal operativo. Jóvenes que utilizaban estos empleos para financiar estudios perdieron ese acceso laboral.

El sector ventas tampoco escapó. Tiendas minoristas incorporaron inteligencia artificial para asesoría de productos, manejo de inventario y sugerencias personalizadas. Las oportunidades de empleo en piso de venta se redujeron drásticamente. –sn–

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