Opinión | Daniel Almazán | La barrera de Rocío

Por Daniel Almazán Jiménez*

En una contienda electoral todo juega, desde el nombre del candidato para la publicidad hasta el apellido para el slogan e imagen… con esos dos elementos inicia todo.

Lo anterior pareciera que es un asunto fácil de crear. Total, se supone que sólo es ligar el nombre y apellido con las promesas de campaña del partido político, lo que muchos piensan, no parece ser tan difícil.

En teoría, una campaña es más que eso y si bien, sí tiene mucho que ver el nombre y apellido, en algunos candidatos sus nombres cobran fuerza, quizá, para bien, pero en ocasiones para mal, como en la alcaldía Venustiano Carranza. La candidata de la coalición del PRD, PAN y PRI, su apellido le ha jugado una mala broma, pues en realidad “Barrera” se ha convertido en la barrera de Rocío en donde los vecinos nomás no la pelan.

Y es que, basta ver en sus recorridos por las calles de la demarcación, los vecinos se atrincheran con el fin de no abrirle la puerta, pues, aseguran, nunca ha sido parte de la transformación que hoy vive Venustiano Carranza. Ni siquiera, ha sido una persona que haga presencia en días difíciles como los vividos durante el Covid-19.

Es por ello que, metafóricamente, su apellido de «Rocío» es usado por los propios vecinos para huirle, pues, como hipérbole, le forman una barrera para no salir y si se la encuentran de frente, mejor le dan la vuelta a la señora.

Pobre Rocío, que en lugar de que su apellido haya sido un elemento rimbombante y llamativo para hacer una buena campaña, sea una barrera vecinal para evitarla y castigarla por su mínima presencia en la alcaldía, tal y como los carrancenses aseguran, pues es de las personas que cada tres años vienen, piden el voto y se van, para no volver sino hasta dentro de tres años más cuando haya campañas electorales.

En lo personal, yo salí a las calles y pregunté a varios vecinos si la conocían y, nadie supo quién era, ni de quien les hablaba, lo que confirma datos de encuestas en donde Evelyn Parra le lleva más de veinte puntos de diferencia, factor muy medido y existente en los datos de dicha coalición que ha desatado una visceral, campaña de desprestigio en contra de la morenista, dejando ver solamente una gran carencia de creatividad en la alianza Va Por VCarranza.

Por ello, coincido con aquellos que dicen que hay personas que en una contienda son derrotados, quizá no por su falta de talento sino por sus errores y defectos personales que a la larga se convierten en una barrera que impiden seguir y continuar su desarrollo como en Venustiano Carranza.

Alcaldía en donde prácticamente sólo existe una candidata que propone, mientras que la otra, descalifica, insulta, se queja y se pone barreras a ella misma siendo la primera de ellas, el ser abanderada de una coalición a la que no hace mucho, calificó como perversa en sus redes sociales.

Por si fuera poco, y para no tragarse sus palabras que ya habían hecho eco, quitaron de la propaganda oficial los logos del PRI y del PAN dejando sólo el del PRD, partido que está en riesgo su registro.

Sin duda fue una acción que, de nueva cuenta, dejó ver la falta de creatividad, pues lo hicieron pensando que no se iba a notar, de lo contrario, quizá creyeron que la gente es estúpida e iban a votar por un partido que ya no los representa.

Hasta donde ha llegado el odio y frustración de algunos candidatos al saberse perdedores en estas campañas electorales que, a falta de propuestas, cualquier pretexto es bueno para justificar campañas sucias sin importar contribuir al hundimiento del barco político en el que ellos mismos navegan… Cuánta frustración corroe a Rocío que, prácticamente, sus defectos son lo que dice su apellido, una barrera en su carrera política…