Por Axel Hernández, reportero

Familiares de personas privadas de su libertad denunciaron en Palacio Nacional, lugar donde despacha el presidente Andrés Manuel López Obrador, violaciones a los derechos humanos en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 14, de Durango.

Irregularidades en la atención de sus familiares, cometidas el pasado 1 de julio por elementos de la Guardia Nacional, contra personas recluidas en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 14 en Durango, fue la demanda del grupo de poco más de cuarenta personas que acudieron a manifestarse en las inmediaciones de Palacio Nacional.

Te puede interesar: Guardia Nacional recupera combustible de procedencia ilícita

Los familiares –acompañados por el colectivo Esperanza de la Libertad y acompañados del Centro de Atención Integral de Familiares con Personas Privadas de la Libertad (Caifam) de la asociación civil Documenta— exigieron la destitución inmediata y la aplicación de sanciones contra Alfredo León Ramírez, director del penal de Gómez Palacio.

Las quejas también fueron dirigidas contra el jefe de seguridad, Gabriel Cruz Guzmán, ante los presuntos actos de tortura registrados contra de los internos.

El contingente, integrado principalmente por mujeres habitantes de la capital y del estado de México, denunció que los guardias nacionales han cometieron abusos contra los reclusos, que van desde la incomunicación con el exterior, el despojo de documentos jurídicos, ropa y cobijas, hasta una serie de agresiones físicas.

Argumentaron tratos inhumanos como el raparles el cabello en contra de su voluntad, desnudarlos, golpearlos, hasta provocar lesiones, además, de haber sido rociados con gas pimienta en la cara, incluso, varios de ellos fueron trasladados a otras prisiones sin que existieran las órdenes necesarias.

Te puede interesar: México desplegaría la Guardia Nacional para cortar flujo de migrantes hacia EU

El pasado 8 de junio, diferentes medios de comunicación reportaron que, a solicitud de las autoridades del penal, llegaron de elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano para custodiar la prisión, ubicada en el ejido 6 de octubre, tras un motín al interior de éste.

Ante este hecho, no se brindó información sobre el saldo de las personas heridas; hasta la fecha no se han pronunciado el gobierno federal por los hechos que, las organizaciones de la sociedad civil y los familiares de los quejosos realizan tanto en la sede del Poder Ejecutivo, como al exterior de los muros que contienen a sus seres queridos. –sn–

• 

• 

• 

• 

• 

• 

•