Fausto Hernández | Reportero
José Amadeo Hernández Barajas, presidente de la Central Campesina Independiente (CCI), advirtió que en el discurso el gobierno federal es consistente con el intento de desmantelar a las organizaciones ya sea eliminándolas de los programas de subsidios o bien presionándolas por la vía fiscal.
Por ello, convocó a fortalecer el movimiento campesino, a construir una agenda básica y tratar de incidir en las políticas públicas; nos pronunciamos también porque los partidos mantengan sus principios y su identidad.
“El ataque a la organización social continúa avanzando y nosotros seguimos en lucha pero dispersos, distantes de otras fuerzas sociales y si no es con unidad, con solidaridad, no vamos a superar esta etapa de agresión y menosprecio a las organizaciones sociales que son producto de la vida democrática de nuestro país”, subrayó.
Ante una eventual reforma fiscal enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que implica una afectación hacia los productores que forman parte de una Unión de Crédito, Módulo de Riego, Asociaciones Rurales de Interés Colectivo, Asociación de Productores, y otras figuras de asociación, no podrán ser parte del Régimen Simplificado de Confianza, el costo que implica esta medida es que pasan de una tasa del 4% sobre su base fiscal a una tasa del 27% y pierden la facilidad para hacer pagos provisionales por semestre.
“El Ejecutivo ha planteado cambios importantes en materia de impuestos: Quiere que al cumplir 18 años, los jóvenes se inscriban en el Registro Federal de Contribuyentes; quiere reducir el financiamiento a las organizaciones de la sociedad civil que realizan actividades altruistas y quiere cambiar de régimen a los productores agropecuarios, con lo que se pagarán más impuestos”, enfatizó.
Al clausurar los trabajos del 58 Congreso Agrario Nacional, el dirigente de la CCI señaló que en cuanto al presupuesto para el campo, nada nuevo que decir, los productores tendrán que esperar mejores tiempos. “Claramente el sector agroalimentario ha padecido de una reducción de presupuesto, y en recientes ocasiones se ha buscado que el sector primario sea tasado con mayores gravámenes, como el intento de incremento de las tarifas de agua. –sn–


